Siniestro de futbolistas: la señalización de las obras en la Autopista Rumiñahui abre la polémica

El siniestro de tránsito en la autopista General Rumiñahui, el cual dejó a dos personas fallecidas y la misma cantidad de heridos, a las 04:00 del lunes 7 de octubre de 2024, generó polémica sobre la señalética que se utilizó para alertar a los conductores sobre los trabajos que se realizaban en el Puente 8.

En ese vehículo estaban los jugadores Roberto Cabezas (+) del Independiente Juniors y Marco Angulo de la Liga de Quito, quien está en cuidados intensivos. Otro ocupante del carro también murió y otros dos están heridos con pronóstico reservado. En total, cinco personas iban en el automotor, según los reportes de las autoridades.

En diferentes plataformas de Internet y redes sociales, un grupo de gente comentó la que la señalética en el sitio fue deficiente. Nicolás Díaz escribió que manejaba por la autopista y no había señalización, tanto así que varios carros llegaron hasta la parada del Puente 8 y les tocó regresar para desviarse por el Puente 7. "¿Por qué no cerraron completamente la autopista? Para mí hay una clara negligencia".

Otros usuarios cuestionaron que solo se haya colocado la cinta amarilla y los jerseys. Para la abogada Lorena Grillo, tras el siniestro de tránsito hay responsabilidades civiles, administrativas graves y penales. En su cuenta de X señaló que existe muerte culposa por inobservancia de leyes, reglamentos, regulaciones técnicas u órdenes legítimas de las autoridades o agentes de tránsito.

Le puede interesar: ¿Quién es Marco Angulo, jugador de Liga de Quito?

En una entrevista con una radio capitalina, Álex Rivera, director de Vialidad de la Prefectura de Pichincha, manifestó que las labores que se realizaban en el puente sí fueron socializadas portunamente desde el viernes 4 de octubre y fin de semana. De hecho, en un comunicado, el Gobierno de Pichincha indicó se iba a cerrar la vía, justo a la altura del Puente 8, durante 13 horas.

Además, aclaró que sí se implementó cierres viales e instaló señalización desde el peaje hasta el lugar en donde se desarrollaba la obra. Eran unos muros anaranjados, tipo jersey, de plástico. Además, nadie podía circular en el carril central. Los únicas habilitadas eran las vías laterales, en las que se pedía a los conductores que manejen sus vehículos a velocidades moderadas.

Ahora, los técnicos de vialidad de la Prefectura y el contratista evalúan los daños en la viga, de 50 toneladas, para avanzar en la reparación. Mantienen reuniones permanentes para analizar la estructura y ver cómo quedó. No se sabe si se mantendrá la misma o si será cambiada debido a que fue impactada con mucha fuerza.

Las obras en el Puente 8 consistían en un paso elevado con el se busca mejorar la interconexión vial entre Quito y el valle de Los Chillos. La Prefectura prevé mejorar la movilidad a cerca de 4 500 usuarios diarios directos y cerca de 100 000 indirectos que pasan por esta ruta todos los días.

Le puede interesar: Los técnicos de la Prefectura evalúan los daños en la viga donde se chocó el carro con futbolistas