El presidente de El Salvador dice que los estados de excepción no funcionan si no tienen estrategia. Las políticas de DD.HH. están en debate
Cada vez que la inseguridad desatada por las mafias y el crimen organizado recrudece, en Ecuador se comparan los planes de acción que emplea el gobierno del presidente Guillermo Lasso con los de Nayib Bukele en El Salvador. Los atentados terroristas ocurridos en Esmeraldas, Durán y Guayaquil desde la madrugada del martes 1 de noviembre, que dejó cinco policías fallecidos, obligaron a que el Gobierno nacional dictara un nuevo estado de excepción, el número 15 desde que inició sus funciones.
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Sin embargo, horas después de ese anuncio, Bukele lanzó un tuit asegurando, sin referirse a Ecuador como tal, que un estado de excepción “es solo una herramienta” y que esta, de por sí, no dará resultados si es que no viene acompañada de “una estrategia” para combatir la inseguridad.
El debate se prendió entonces, cuando varios sectores, incluido el PSC, validó la tesis del mandatario salvadoreño. Miles de personas en redes sociales han demandado del Gobierno una lucha más firme en contra de las mafias. Sin embargo, también hubo voces, entre ellos juristas y activistas sociales, que recordaron que ninguna política contra el crimen es legítima si no se respetan los derechos humanos de todas las personas.
El domingo 11 de septiembre de 2022, el programa Políticamente Correcto que transmite Ecuavisa, analizó a profundidad las particularidades de la situación de violencia en El Salvador y comparó con el complejo momento que vive el Ecuador como para saber si, en efecto, la fórmula Bukele puede aplicarse.
En ese panel participaron el exdiputado y periodista deportivo Alfonso ‘Pocho’ Harb, quien ve viable un esquema firme de lucha contra el crimen organizado que ha puesto en El Salvador a más de 50 mil pandilleros en la cárcel en menos de seis meses, reduciendo a cero las muertes violenta en las calles.
El jurista y experto en DD.HH., Juan Pablo Albán, se opone a esta fórmula pues señala que la realidad ecuatoriana se parece más a la de México y que es preferible abordar la realidad criminal siempre en el marco de la Constitución, pues los reclamos a los supuestos excesos de Bukele en su sistema democrático han sido señalados por organizaciones internas y de ámbito internacional.
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Finalmente, Carolina Andrade, exsubdirectora de la Secretaría de Inteligencia SENAIN, en la época de Rafael Correa e inicios de Lenín Moreno, también se opone a una fórmula Bukele, pues asegura que el país debe invertir en rehabilitación, inteligencia e interdicción para adelantarse a los golpes criminales.
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