04 sep 2017 , 02:24

Torturas con choques eléctricos, nueva denuncia de internos contra cárcel de Turi

Tras las denuncias, se realiza audiencia por delito de extorsión en contra de 24 personas.

Una investigación por extorsión en la cárcel de Turi, en Cuenca, deja en evidencia posibles prácticas de tortura dentro de ese centro de rehabilitación social. Testimonios corroborados por informes médicos dan cuenta de aplicación de choques eléctricos en los pulgares.

 

Varios internos cuentan que se les aplicaba un método de agresión colectiva conocido como "el camionetazo", otros relataron a la fiscal que 'los dejaban toda la noche en agua helada'.

 

El nuevo proceso judicial en Turi por una red de extorsión involucra desde internos hasta quien fue director del centro.

 

Uno de los privados de libertad dio su testimonio al perito médico forense: "...he venido viviendo una pesadilla, me han apuñalado en los glúteos, el pulmón. En las noches me metían en la ducha de agua fría. Me torturaban (...) pasaban los cables por medio de unas ventanas de una celda que había al lado, me ponían los pies uno en un balde de agua, el otro en otro balde de agua y los cables en los pulgares...".

 

El interno fue examinado y el informe médico forense concluye que existe concordancia entre lo descrito y las lesiones encontradas en su cuerpo.

 

Sobre la tortura con electricidad, el perito indica: "... la lesión descrita a nivel de mano izquierda, segundo dedo falange distal es consecutiva a energía eléctrica que se convierte en energía calórica, generando una lesión térmica. por las características de la lesión el cuadro no pudo haber sido causado por traumatismos distintos a los descritos...".

 

El examen se hizo hace dos semanas y el interno asegura que ha vivido estas torturas durante un año hasta tres días antes del examen.

 

En el expediente fiscal hay varios relatos de presunta tortura y agresiones extremas. "... Me agredían entre 15 personas, eso se llama camionetazo (...) Me golpeaban con tubos, me trizaron el pie, el antebrazo. en promedio me agredirían unas 30 veces..."

 

Este interno cuenta que tuvo que pagar para que no le den choques eléctricos, pero vio como los aplicaron a otros compañeros. Es que la tortura se aplicaba, en la mayoría de los casos, para exigir dinero.

 

Sobre este caso, se instaló este 4 de septiembre de 2014 en Cuenca, la audiencia de dictamen fiscal por el delito de extorsión en contra de 24 personas, entre ellas el exdirector de la cárcel y los excoordinadores, pues en varias versiones que constan en el proceso se indica que tuvieron conocimiento de los sucedido.

 

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