Nueve mujeres ecuatorianas fueron premiadas por la Sociedad Femenina de Cultura

La pandemia impone reglas. Poco público, distancimiento obligatorio, mascarillas para todos, pero al final nada logra opacar el sentimiento de orgullo que inunda un sala en la que se reconocen trayectorias y se premian talentos.

Eso pasó hoy en el Centro de Arte de Guayaquil, 9 mujeres que han dedicado sus vidas a distintas expresiones del arte. Unas en la danza, otras en el canto, la pintura, las letras. Todas juntas en un escenario para, como dijo una de ellas, sembrar un poco de lo que se cosechó.

"Una siembra sin esperar nada más que ser leal a una misma. Leal a lo que uno siente que debe ser, porque cuando uno trabaja con pasión no siente que está trabajando", afirmó la actriz Alejandra Paredes.

La Sociedad Femenina de Cultura, una fundación dedicada a eso, a promover el arte y la cultura en todas sus manifestaciones fue la que llevó a cabo esta ceremonia de reconocimiento. Quienes recibieron el homenaje fueron: Gloria Gallardo, presidenta de la empresa pública de turismo de Guayaquil, Mónica Cuesta y Scarlett Pazmiño, ambas referentes de la danza, Cecilia Jurado (cuyo nombre artístico es Ceci Juno)  y Blanca Layana Gómez, cuya vida está en la música, Alejandra Paredes en el teatro, María José Argencio en las artes plásticas y Cecilia Vera de Gálvez junto a Tania Tinoco, periodista de Ecuavisa, con su arte puesto en las letras y en las palabras.

"Es muy generoso por parte de la Sociedad Femenina de Cultura creer que las personas que utilizamos las palabras para contar historias, de mujeres muchas veces, podemos estar a la par de estas aristias. Así que de verdad muchas gracias", afirmó Tinoco.

En la gala, que debió ser corta por normas de bioseguridad, hubo un reconocimiento más: a Cynthia Viteri. Y aunque la alcaldesa no pudo asistir, el homenaje quedó, porque el mensaje de fondo fue el de demostrar algo que debería ser obvio. Que el éxito, el aporte de todas ellas a la sociedad, no tiene que ver con su género, sino con su tesón, su trabajo y su propia capacidad