La sonda deberá soportar temperaturas cercanas a 1.400 grados centígrados sin derretirse.
La sonda deberá soportar temperaturas cercanas a 1.400 grados centígrados sin derretirse. Foto: NASA/JOHN HOPKINS APL
07 ago 2018 , 05:26
Redacción
Es una de las misiones más ambiciosas de la NASA.
Este domingo* un cohete despegó desde Cabo Cañaveral con una carga muy especial: una sonda que buscará "tocar el Sol", según la NASA, llegando más cerca de nuestra estrella que ninguna misión anterior.
La Sonda Solar Parker, Parker Solar Probe en inglés, fue diseñada para soportar temperaturas cercanas a los 1.400 grados centígrados sin derretirse.
Los científicos esperan que la misión ayude a resolver uno de los grandes misterios de la astronomía: por qué la corona solar es más caliente que la superficie del Sol.
Un misterio de más de medio siglo
La misión lleva el nombre del físico estadounidense Eugene Parker, que en la década de los 50 planteó nuevas teorías sobre la forma en que las estrellas, incluido el Sol, despiden energía.
Parker llamó a esta "cascada de energía" viento solar y también especuló sobre el misterio de la corona solar.
La temperatura de la corona, una parte de la atmósfera solar, supera los dos millones de grados centígrados. Pero la superficie del Sol tiene una temperatura de unos 6.000 grados.
"La corona solar es la extensión formada de plasma que rodea el sol y otras estrellas", explicó a BBC Mundo Mario Pérez, científico de la División de Astrofísica de la NASA.
"La temperatura en la corona, que se ha medido a través de líneas de emisión de elementos altamente ionizados, indica que a pesar de tener una densidad muy baja comparada con la fotósfera, que es la parte visible del sol, tiene una temperatura unas 400 veces mayor de varios millones de grados Kelvin".
Además del enigma de la corona, la misión intentará resolver otros dos misterios: cómo nacen los vientos solares con sus partículas cargadas, y qué causa las grandes eyecciones de masa coronal o CME por sus siglas en inglés, que se desprenden del Sol durante períodos de máxima actividad solar y pueden afectar a los satélites y sistemas de comunicación en la Tierra.
"El Sol para transmitir su energía lo hace a través del viento solar, que es un flujo de partículas cargadas emitidas desde la corona solar", afirmó Pérez.
"Estas partículas forman un plasma con componentes tales como electrones, protones y partículas alfa o nucleones. En ocasiones y dependiendo del ciclo y actividad solar, esta liberación de plasma y magnetismo al espacio es significativa y se convierten en eyecciones notorias que son parte de erupciones solares de materia al espacio".
"El interés es poder anticipar o predecir estas erupciones con objeto de proteger satélites y dispositivos sensibles a la radiación en nuestra Tierra".
¿Por qué no se derrite?
Una vez que la sonda abandone la Tierra, hará una maniobra en torno a Venus para reducir su velocidad y aproximarse de manera controlada al Sol.
Está previsto que la sonda llegue a su primer punto de aproximación al Sol el 5 de noviembre y continúe aproximándose más y más a la estrella a lo largo de 25 órbitas durante siete años.