Qué revela el primer mapa geológico de toda la superficie de la Luna
Su nombre oficial es el "Mapa geológico unificado de la Luna" y lo creó el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés) junto con la NASA y el Instituto Planetario Lunar.
Cada uno de los colores del mapa representa el tipo de rocas y cráteres que componen el suelo de la Luna, que la hacen parecer un gigantesco queso roquefort.
Sus creadores afirman que este mapa será clave para las futuras misiones a la Luna y que resulta "invaluable" para la comunidad científica y el público en general.
¿Cómo lograron este llamativo mapa y qué detalles revela sobre nuestro satélite natural?
Atando cabos
El mapa es el más completo y detallado que se haya creado pero fue posible, en parte, gracias a seis mapas de regiones de la Luna que se habían hecho en las décadas de los 60 y 70.
Esos mapas luego se completaron y se alinearon con información más reciente, obtenida de satélites enviados a la Luna.
Una vez que unificaron la información antigua con la nueva, los investigadores del USGS hicieron una descripción de las capas de roca de la Luna.
La descripción de la región ecuatorial de la Luna, por ejemplo, se logró gracias a observaciones del satélite Kaguya, también conocido como Selene, de la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA).
La topografía de los polos norte y sur se complementó con datos del orbitador lunar de altímetro láser de la NASA, más conocido como LOLA.
¿Qué muestra el mapa?
El mapa está hecho a una escala de 1:5.000.000, es decir, cada milímetro del mapa representa 5 kilómetros de la Luna.
Está dividido en 43 unidades geológicas a lo largo de toda la superficie lunar.
A su vez, estas unidades se dividen en grupos según sus características, como el material de los cráteres, o si son llanuras, cuencas o formaciones volcánicas.
Las zonas más oscuras, de tonos más tierra, son zonas de altiplano, según le explicó al portal Science News el geólogo James Skinner, quien coordina la producción de mapas de cuerpos del sistema solar en el USGS.
Las regiones rojas o púrpuras tienden a ser áreas volcánicas o de antiguos flujo de lava, según Skinner.
El amarillo, por su parte, indica rocas que se formaron en el actual período copernicano, que comenzó hace mil millones de años, según explica el portal Gizmodo.
En particular los polos son de especial interés geológico para los científicos. Se calcula que ahí, en el interior de algunos cráteres que nunca reciben la luz solar, puede haber miles de millones de toneladas de hielo.
¿Para qué sirve?
"El mapa ofrece información vital para nuevos estudios científicos al conectar la exploración de sitios específicos en la Luna con el resto de la superficie lunar", dicen los autores del estudio en un comunicado.
Conocer detalles sobre las regiones y los materiales que componen el suelo lunar también puede ser útil para identificar dónde puede haber algún tipo de recursos o que puedan ser aptas para alunizar naves de manera segura.
"La gente siempre ha estado fascinada con la Luna y con la posibilidad de que regresemos ahí", dijo Jim Reilly, director del USGS y exastronauta de la NASA.
"Es maravilloso ver que el USGS cree un recursos que pueda ayudar a la NASA con la planeación de sus futuras misiones", concluye Reilly.