Ecuador bajo ataque: los repartidores motorizados no pueden transitar con seguridad por la delincuencia

Entre los integrantes de la Asociación de Deliverys Independientes del Ecuador (DELEY) existe preocupación por la inseguridad y los hechos de violencia que golpean al país, lo cual ha conllevado a que el presidente Daniel Noboa Azín decrete el estado de excepción y que todo grupo terrorista sea considerado un objetivo militar.

En medio de ese contexto, los repartidores no pueden transitar con seguridad en las calles para realizar sus actividades, "pues corremos el peligro de ser víctimas de robos o ataques", señala un comunicado de esa entidad.

Pidieron al Gobierno y a las autoridades que trabajen de manera urgente para restaurar el orden y la paz. Apoyan las acciones que impulsa el presidente Noboa, la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas. "Esperamos que podamos volver a tener el Ecuador de paz y seguridad con el cual soñamos, gracias a la unidad y el esfuerzo de todos".

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En otro ámbito, el Gobierno quiere un cambio en los instrumentos legales que permitan a las fuerzas del orden cumplir su deber. Así lo explicó el secretario de Comunicación, Roberto Izurieta, durante una entrevista para Contacto Directo.

El funcionario señaló que los cambios estructurales son necesarios para "ganar la guerra". Y que las acciones deben ser progresivas "considerando las limitaciones de oficiales en acción".

Al momento, la mayor prioridad está en el control de cárceles y zonas donde hay acciones criminales, dijo. A la par se trabaja en la protección de ciudadanos, pero Izurieta explica que cambios legales son necesarios para que los procesos desde la detención de los criminales, pasando por su enjuiciamiento y terminando con la prisión, se cumplan a cabalidad.

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