Una hora y media de terror, este es el testimonio de varios trabajadores de TC Televisión: Yo pensé que moría

El 9 de enero de 2024, Tatiana (nombre protegido), trabajadora del canal de televisión TC, se encontraba en otro día de trabajo rutinario en el lugar donde ha laborado durante una década. Alrededor de las 14:00, mientras almorzaba en el comedor junto a sus compañeras, comenzaría una hora y media de terror inimaginable.

"Vimos que entraron los tipos armados. Buscamos la forma de escondernos, las mujeres corrimos al baño", cuenta a este medio y agrega que entre sus compañeras también había mujeres embarazadas.

Tatiana, quien prefiere mantener su nombre en el anonimato por seguridad, cuenta que una vez en el baño, "compañeros hombres nos llevaron a la terraza", donde se mantuvieron agachados en el piso aterrorizados mientras escuchaban el sonido de las balas.

Es que abajo, en el estudio del canal, entre sus compañeros se encontraba el periodista, Jorge Rendón, quien en declaraciones previas señaló que los sujetos portaban armas largas y estaban encapuchados, ellos incluso dispararon dentro del estudio durante la transmisión.

El grupo identificado como Los Tiguerones quería hacer llegar un mensaje obligándolos a pedir ante las cámaras que no interviniera la Policía, testigos aseguran que todo el tiempo uno de los encapuchados recibía instrucciones por el celular.

"Fue un ataque sumamente violento", añadió el periodista y contó que hirieron a un camarógrafo en la pierna y fracturando el brazo de otro.

Así, el terror se extendía en todo el canal, unos trabajadores desde el estudio, otros en la terraza, en los baños y Diana (nombre protegido) desde el departamento al que pertenece, en el primer piso, "de repente escuchamos gritos, voces fuertes, pensamos que era alguna discusión fuerte o pelea que se estaba dando en la planta baja", cuenta a Ecuavisa.com.

Varios de sus compañeros se levantaron a verificar lo que pasaba, pero al asomarse a las escaleras regresaron corriendo: "Esos hombres venían armados al primer piso".

El departamento de Diana es uno de los primeros en verse al subir, describe, cuando constataron la situación corrieron a esconderse:

"Nos encerramos todos, apagamos las luces, monitores y cada uno se puso debajo de su puesto de trabajo".

En ese instante, uno de sus colegas hizo la llamada de emergencia al 911 solicitando ayuda, Diana recuerda lo que decía: "Se están tomando TC". La angustia se apoderaba de ellos mientras intentaban mantener la calma, "tratamos de no hacer ruido por más miedo que sentíamos, pues se escuchaban golpes fuertes, luego muchas balas".

En medio de la incertidumbre, cruzaba por sus mentes la posibilidad de que "nos tumbarían la puerta en cualquier momento, pero no pasó".

Mientras tanto, Tatiana, desde la terraza y sin poder ver lo que ocurría en otras áreas, escuchaba el estruendo de las balas. "Teníamos miedo, terror, porque no sabíamos cómo estaban los otros", y para ella, esa hora y media que duró el ataque se volvió eterna.

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Al comunicarse con sus familiares para informarles que se encontraba bien, ellos, desde afuera, observaban con horror la transmisión de los individuos armados:

"Nuestros familiares nos decían que habían bombas, yo pensé que moría".

Durante ese tiempo, se comunicó con su hijo y su madre. "Ella no podía hablar, estaba muy mal. Les avisé que estaba bien, pero que no sabía qué pasaría".

Tatiana recuerda claramente la hora en que fueron rescatados: las 15:15. "La Policía nos sacó por los techos hasta un lugar seguro".

Ambas trabajadoras continúan aterradas por lo vivido, y sienten miedo de regresar al canal. "Me duele el cuerpo, como si hubiese corrido muchísimo", concluye Tatiana.

Hoy los 13 detenidos permanecen, desde la tarde del martes 9 de enero, en el Cuartel Modelo de Guayaquil, entre ellos hay dos menores de edad y un extranjero.