Cárceles en Ecuador: 2.581 presos han muerto desde el 2019
Los presos se enfrentan mayoritariamente a la posibilidad de morir por enfermedades que no son tratadas correctamente en las cárceles o en masacres como las ocurridas desde el 2019.
Ecuavisa.com procesó las cifras sobre la mortalidad carcelaria en los últimos cuatro años y cuatro meses. Las estadísticas entregadas por el Servicio de Rehabilitación Social (Snai) indican que, en promedio, casi dos presos fallecen al día en cualquiera de las cárceles.
Le puede interesar: Informe revela mecanismos de extorsión a los familiares de reclusos en Ecuador
En total, 2.581 privados de la libertad murieron al interior de las prisiones desde 2019. Estas muertes obedecen a violencia intracarcelaria (enfrentamiento criminal entre presos) o a causas naturales; es decir, por enfermedades.
Las muertes se multiplicaron especialmente en 2021 y 2022 cuando se registraron las masacres con el mayor número de muertos.
El Estado ecuatoriano ha decretado desde el 2013 dos estados de excepción con sus respectivas ampliaciones. Ha pasado más de 12 meses en emergencias y no se ha resuelto el problema de la violencia. De hecho, ya son 13 masacres en total. La última, el 15 de abril del 2023, dejó 12 presos muertos en la Penitenciaría del Litoral.
Las muertes violentas son las más numerosas.
Los datos revisados por Ecuavisa.com señalan que el 45% de las muertes se dio por violencia intracarcelaria, según la información oficial. Es decir, 1.159 presos fueron asesinados.
Los registros de la Fiscalía indican que las formas más frecuentes de los ataques son por uso de armas blancas como machetes, cuchillos o fierros afilados.
Le puede interesar: Violencia en Ecuador: ¿a qué se deben los ataques y la crisis carcelaria?
También se registran muertes por armas de fuego, aplastamiento con objetos contundentes, detonaciones de artefactos explosivos y estrangulamiento.
La Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil, (codificada oficialmente por el Snai como CPL 1) es el lugar donde más muertes se han producido. Solo en este centro se contabilizan 518 por causas naturales o por enfrentamiento entre bandas.
En abril, los hechos violentos han recobrado fuerza en este centro denominado de rehabilitación. El 15 murieron 12 presos en enfretamientos. Dos días antes fueron asesinadas tres guías penitenciarias mientras almorzaban en los exteriores y un día después de estos crímenes fueron encontrados 6 privados de libertad colgados sin vida en sus celdas.
El 44% de muertes de presos se da por enfermedades
Lejos de la atención que convocan las masacres, hay otra crisis en las cárceles. Los decesos de presos que se consideran por causa natural llegan al 44% del total de muertes. De hecho, en las estadísticas oficiales se observa que estas muertes están por debajo, apenas por 11 casos, de las muertes por violencia intracarcelaria.
La Comisión para el Diálogo Penitenciario emitió un informe en 2022. En el documento indica que los presos no tienen tratamiento para tuberculosis, sida e infecciones contraídas dentro de las cárceles.
Le puede interesar: El crimen organizado se afianza en Ecuador, mientras que el Gobierno repite estrategias
La entidad también señala que no existen medicinas ni tratamientos médicos. Y se indica que las precarias condiciones de los centros carcelarios (falta de agua e insumos de higiene) aumentan la posibilidad de contraer enfermedades.
Otros privados de la libertad, que tienen patologías crónicas como hipertensión, diabetes o cáncer también complican sus cuadros médicos dentro de las prisiones, según Billy Navarrete, del Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos.
Navarrete contó que hay múltiples casos. En uno, registrado en 2020, se constató que las autoridades no registraron la enfermedad de un preso que tenía VIH-Sida. La persona murió sin recibir su tratamiento. "Hay gente que muere por no tener atención a enfermedades perfectamente controlables", indicó.
Demandas para el Estado por familiares de los presos
Los familiares de las personas privadas de la libertad asesinadas en las primeras once masacres carcelarias presentaron una acción de protección en contra del Estado.
El Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos del Ecuador (CDH), Red Internacional de Mujeres Familiares de Personas Privadas de la Libertad (Rimuf) y por el Comité de Familiares por la Justicia en las Cárceles, conformado por 30 familias de presos, presentaron esta acción que busca una reparación.