La Armada patrulla con helicópteros y francotiradores la Isla Puná, un punto clave en la ruta de los buques a los puertos de Guayaquil

La Armada del Ecuador patrulla desde el aire, con francotiradores, la Isla Puná, uno de los puntos críticos en la ruta de los buques que ingresan y salen de las terminales portuarias de Guayaquil.

Es un tramo obligatorio de estas embarcaciones y para evitar que sean contaminadas con droga en su ruta hacia el Océano Pacífico, la Infantería de Marina inició operaciones permanentes en esta zona.

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Después de Isabela y Santa Cruz, en las Islas Galápagos, Puná es la más extensa con 920 kilómetros cuadrados, tiene 12 mil habitantes.

Otra de las características clave es su cercanía con el puerto de aguas profundas de Posorja, siendo una de estas las razones que es percibida como un eje estratégico para el crimen organizado.

De acuerdo a información de las Fuerzas Armadas, en esta isla se han instalado bodegas clandestinas de combustible, carburante que luego es trasladado en lanchas rápidas hacia altamar.

"La semana pasada se hizo el decomiso de dos embarcaciones con motores que presuntamente fueron robados, con una gran cantidad de combustible, que puede ser utilizada en altamar para abastecer a lanchas rápidas que llevan sustancias sujetas a fiscalización a otros países", afirma un jefe del operativo militar.

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Con estas operaciones, la Armada también trata de combatir a las bandas de piratas asentadas en esta zona del Golfo de Guayaquil.