Desaparición de alias Fito trastoca plan de seguridad y consulta popular de Daniel Noboa
El discurso del gobierno va por una sola línea: señalar que la desaparición de alias Fito es una reacción a la decisión del gobierno de quitarle los privilegios de los que gozaba en la cárcel, para que no siga operando como lo venía haciendo.
También reconocen que se filtró la información del operativo de traslado, al tiempo que insisten en que el reo temía el fin de lo que los voceros del régimen llaman libertinaje.
Apenas se enteraron en el Ejecutivo de la desaparición del cabecilla de Los Choneros empezó una triple búsqueda: la del fugado, la de los funcionarios que facilitaron el escape y la de un mensaje para comunicar a la sociedad un hecho que trastoca los escenarios en los que el régimen había previsto moverse en los próximos días y semanas.
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Están en la elaboración del discurso que dote de valor a la construcción de una cárcel de ultramáxima seguridad en la Amazonía. La presunción que tienen el tema resuelto parte del hecho evidente de que el Estado no controla las prisiones y, por ende, necesitan contar con una nueva infraestructura en la que los reos no manden.
En esa misma línea se busca recomponer la noción de necesidad y urgencia de los temas propuestos en la consulta popular. Sostienen que los hechos empatan con la visión del régimen, que es evidente que el país requiere la participación de fuerzas armadas en actividades cotidianas de combate al crimen.
Militares y policías deben contar con una protección legal que evite que se los prive de la libertad mientras dure el proceso de investigación y juzgamiento por actos cometidos en el ejercicio de sus labores de lucha contra las mafias.
Advierten que lo que se busca es que estos temas no estén a la cola de 180 proyectos legislativos, que la intención es que sean la prioridad, y contar con esas herramientas lo más pronto posible.
Las nuevas proposiciones de la consulta popular
A esto se suma la recomposición de la consulta. Volvió a la mesa de análisis la pregunta de la extradición de quienes cometan delitos transnacionales. El tema que fue dejado por fuera del pliego en primera instancia habría sido incorporado al considerar que, ante los últimos hechos, la opinión pública tendría un pronunciamiento favorable.
Sin embargo, tienen claro que la inclusión de ese tema es contrario a la intención primera de bajarle la temperatura a la política y podría provocar incluso el alejamiento de fuerzas políticas que hasta ahora han respaldado las iniciativas legislativas del gobierno.
El gobierno todavía calcula si van a asumir o no ese costo político. La administración parte de un principio en el que desconoce la existencia de un pacto. De hecho, señalan que los proyectos urgentes presentados hasta el momento no han abordado ciertas materias precisamente porque no hay acuerdos incondicionales.
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Entonces, la crisis de seguridad pone en bandeja por un lado la gobernabilidad coyuntural, y por otro, la percepción ciudadana que podría afectar los respaldos a una gestión que recién empieza y que tiene un caos absoluto entre sus manos.
En las nuevas preguntas de la consulta podría haber un desfogadero. Las que serán votadas en referéndum podrían ser presentadas a inicios de la próxima semana. Hay análisis en Carondelet y se camina sobre cristales.
A través de sus redes sociales, el presidente Daniel Noboa, declaró el #EstadoDeExcepción para "recuperar el control de los centros de privación de libertad que se ha perdido en los últimos años". 📌
— Ecuavisa Noticias (@EcuavisaInforma) January 8, 2024
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