La proliferación de ratas preocupa a los moradores y comerciantes del centro de Guayaquil
En el corazón de Guayaquil, específicamente en las calles Rumichaca y Padre Solano, los residentes y comerciantes enfrentan una preocupante invasión de roedores. La situación, originada en una esquina que se ha convertido en un botadero de basura, ha encendido las alarmas entre quienes viven y trabajan en esta área.
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El equipo de Televistazo en la Comunidad acudió al lugar para constatar la alarmante insalubridad que afecta la calidad de vida en el centro de la ciudad. Las imágenes obtenidas muestran cómo las ratas se pasean libremente por las aceras, evidenciando un problema que no solo es visible, sino también grave.
Los dueños de locales comerciales han tenido que luchar constantemente para evitar que estos roedores invadan sus negocios.
La situación se agrava durante la noche, cuando la basura se acumula en las aceras y personas hurgan en los desechos abren las bolsas, dejando los desperdicios esparcidos por todas partes.
Según José Acaiturri, representante de una empresa de fumigación y control de plagas, la acumulación de basura y los edificios abandonados son factores determinantes en la proliferación de las ratas.
Estos animales, que comienzan a reproducirse a partir de los tres meses de vida, encuentran en estos entornos las condiciones perfectas para multiplicarse rápidamente.
El Dr. Alberto Campodónico, médico internista, advierte sobre los riesgos para la salud pública. Las ratas son portadoras de diversas enfermedades, entre las que se incluyen la leptospirosis y el hantavirus, las cuales pueden transmitirse a los seres humanos a través del contacto con residuos orgánicos de estos animales.
Un informe del Municipio de Guayaquil hasta enero de 2023 revela la magnitud del problema: se estimaba una población de aproximadamente 50 millones de ratas en la ciudad, lo que equivale a unos 30 roedores por cada habitante.
La comunidad exige una respuesta rápida y contundente de las autoridades para solucionar este problema que no solo afecta la imagen de la ciudad, sino que también pone en riesgo la salud de sus habitantes y el bienestar de sus comercios.