Técnicos de EEUU trabajan en la vía Quito - Lago Agrio que podría colapsar
La vía que une Pichincha y Sucumbíos fue cerrada por la emergencia.
La erosión avanza y cada día que pasa la carretera que une Pichincha y Sucumbíos está más cerca del colapso. Por eso la circulación vehicular fue suspendida, según informó el ministro de Obras Públicas, Gabriel Martínez en su cuenta de Twitter en la que mencionó que "es evidente el desprendimiento de material que afecta la red vial estatal en el sector San Rafael. Tomamos la decisión responsable de cerrar el paso vehicular para garantizar la seguridad de los usuarios".
Los ríos Montana y Marker, que son afluentes del río Coca, han aumentado su caudal y también entraron en un agresivo proceso de erosión regresiva hacia la carretera, pero también hacia dos oleoductos y un poliducto que corren paralelos a la vía.
El proceso empezó en abril y causó la rotura de los oleoductos, lo que obligó a Petroeacudor a construir una variante de 1.100 metros por la que este domingo se volverá a bombear crudo. Sin embargo estos trabajos también están en riesgo.
“Tenemos como una prioridad también entender este fenómeno y encontrar una solución definitiva, trabajamos con geólogos y geofísicos investigando que es lo que pasa en esta zona”, dijo Pablo Flores, gerente de Petroecuador.
A los equipos especializados de Ecuador se unió también un grupo de expertos estadounidenses, entre los que están geofísicos y geólogos, quienes ayudarán a estudiar la erosión regresiva del río Coca y sus afluentes.
“Tenemos una fuerza de tarea de hasta 15 agencias, expertos técnicos y científicos de varios lugares trabajando de cerca. Ya están compartiendo información y ofreciendo sugerencias técnicas de cómo contrarestar o responder a esta situación”, comentó Michael Fitzpatrick, embajador de Estados Unidos.
Por lo pronto el tramo de la carretera que corre más riesgo fue declarado en alerta naranja, y se trabaja en un paso alterno que aleje los vehículos lo más posible del cause de los ríos.