Quito: buses de transporte urbano en malas condiciones causan malestar a usuarios
Las imágenes se repiten a diario en el Distrito Metropolitano. Al interior de un bus articulado había goteras y un pasajero se protegía con paraguas. En un siniestro de tránsito, un vehículo perdió el eje posterior y se desarmó, lo cual se viralizó en redes sociales.
En un recorrido realizado por el noticiero de Televistazo en la comunidad se evidenció que en cientos de unidades las llantas se encuentran en mal estado y en otros hay deterioro de latas o de las piezas. En algunos, los asientos están desgastados por el uso.
En Quito circulan 3 330 buses urbanos, entre los del servicio municipal y convencionales; es decir, de operadoras privadas. Algunos preocupan a los vecinos por sus daños físicos y mecánicos; sin embargo, en su mayoría aparentan estar en buenas condiciones.
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Pero, ¿cuál es la situación de cada sistema de transporte y sus diferencias? Los corredores municipales, Trolebús y Ecovía, cuentan con una flota activa de 250 unidades y 207 diariamente operativas, con diez en reserva frente a daños de buses en circulación. Todas están en constante mantenimiento preventivo y correctivo.
La primera flota del Trolebús ya cumplió su vida útil, pues lleva 27 años. En el 2016, 31 fueron dados de baja, 19 aún se encuentran operativas y en diciembre serán dadas de baja 28 unidades más, es decir que de la primera flota ya no quedará ninguna en circulación. 37 buses han sido repotenciados.
El sistema municipal transporta 400 mil usuarios por día. De su parte, el transporte privado traslada 1,4 millones. Los buses convencionales tienen 14 años de circulación en promedio. Son 2 800 en circulación cuya vida útil es de 20 años y están en un promedio de 14, según la organización Justicia Vial.
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