Pacientes de hospital de Quito hablan con sus familiares a través de tablet
La nieta de María llora al ver a su abuelita a través de una tablet, el único medio por el cual ahora puede saber de ella ya que hace 5 días ingresó a hospitalización diagnosticada con COVID-19. "Todo limpiecito, que no salgan a las calles las niñas por favor", dice María a sus familiares.
La nieta de María llora al ver a su abuelita a través de una tablet, el único medio por el cual ahora puede saber de ella ya que hace 5 días ingresó a hospitalización diagnosticada con COVID-19.
"Todo limpiecito, que no salgan a las calles las niñas por favor", dice María a sus familiares.
Mientras, Alexandra Alarcón recibe la bendición de su abuelito de 84 años. "Esté tranquilito que acá fuera le estamos esperando, deme la bendición", le pide. Hace 10 días no lo veía pues él esta con oxigeno en un sala de cuidados para pacientes con COVID.
"Tenemos esa fe de que él se va a recuperar órque es un hombre muy fuerte", afirma Alexandra.
Estas son algunas historias de familias que se vuelven a reencontrar a pesar de que los separa el virus.
El Hospital IESS Quito Sur ha implementado tablets para que los pacientes, que ingresan y que no pueden recibir visitas, no se sientan solos y puedan comunicarse con sus familias. El personal de enfermería es el encargado de realizar estos encuentros.
"Yo en el paciente veo reflejado un padre, hermano, amigo. (...) A mí lo que me interesa es que el paciente salga, que esté estable, que se ría y que nos olvidemos ese rato de la enfermedad", explica Mónica Cazar, auxiliar de enfermería de ese centro médico.
Los familiares por lo general esperan siempre en los exteriores de las casas de salud con la esperanza de ver a su madre, padre o hermano que está internado. Algunos logran salir pero otros encuentran su última despedida a través de este medio.
Esto les da fuerzas, aliento para batallar aunque se encuentren en una situación crítica. Un aliciente para los que ingresan solos mientras sus familias rezan para poder volverlos a ver sanos y salvos.