María Isabel de Lebed y su nuevo desafío en el noticiero dominical
La presentadora del noticiero habla de sus nuevos retos profesionales.
María Isabel de Lebed, reconocida presentadora de noticias en Ecuavisa durante 40 años, habló para Ecuavisa.com sobre sus nuevos desafíos en la pantalla chica. Ahora presentando el noticiero dominical, la comunicadora resalta su puesto.
Además, María Isabel se refirió a la adaptación que tuvo que realizar ante la pandemia de COVID-19, que afecta al país desde el pasado mes de marzo del 2020.
Finalmente, la conductora dio muestras de la evolución del periodismo ante las nuevas tendencias web.
Llevo más de 2 meses presentando el noticiero de los domingos, me involucro mucho en la elaboración de la agenda del medio, soy una presentadora que participa en el contenido.
Todo implica un desafío, pero ahora debo aprovechar para aclarar algo al público, a partir del mes de marzo, cuando dejé la pantalla de un momento a otro, así como otros compañeros de la redacción de Guayaquil tuvimos que hacerlo. Tuvimos un compañero de aquí que falleció, además gran parte de nuestro equipo había sido contagiado, por lo que hubo que hacer una operación de crisis sanitaria de emergencia en el canal, para recomponer al equipo.
En ese momento tomé una decisión, dado que en casa tengo una persona con la salud vulnerable, decidí retirarme unos días, hasta que se estabilice la situación, como efectivamente ocurrió.
Este es un enemigo invisible, completamente desconocido, llevándose tantas vidas en poquísimos días, sin que el sistema de salud esté preparado para atender la emergencia. Fue una suma de factores realmente hizo que tengamos una experiencia inédita.
No pensé en renunciar, mi pasión es el periodismo y Ecuavisa es mi casa, siempre pensé en regresar.
El primer desafío del periodismo fue acercarse en la primera línea de la pandemia, ir a hospitales, enfermos, y eso habla de los riesgos del oficio.
Pero además aprovechar las herramientas web, para poder interconectar a la sociedad, y eso ha sido una evolución necesaria.
Empecé en 1980, ya habían reporteras, muy pocas presentadores, me puedo llamar orgullosamente pionera en la televisión ecuatoriana, pero en ese momento, no teníamos un espacio desarrollado...poco a poco los roles de género se fueron equiparando.