Licoreros abaratan precios antes de nueva norma de etiquetado
Desde enero las botellas de tequila, vino, whisky y vodka deben importarse con una etiqueta especial
Una nueva disposición del Servicio Nacional de Aduanas pone en aprietos a los distribuidores e importadores de licores en el país. Desde enero, las botellas de tequila, vino, whisky y vodka deben importarse con una etiqueta especial ubicada en la parte frontal del licor.
José Luis Pons, distribuidor de licores, asegura estar preocupado pues se enteró que dentro de cuatro meses más las botellas tendrán que tener etiquetas nuevas, de lo contrario no podrán comercializarse.
La Resolución 300 de la Aduana del Ecuador, emitida el pasado 9 de agosto, establece que, 30 días después de su publicación en el Registro Oficial, todas las botellas de licor que se embarquen al país deberán contar con la nueva norma de etiquetado, establecida dentro del mismo documento.
Para el vodka, whisky, tequila y ron se exigirá no solo que cuando lleguen al país tengan la etiqueta con todos los datos del importador, como hasta ahora, sino que esos datos sean impresos por la misma fábrica que elabora el producto.
La medida es para evitar el contrabando de licor en la frontera. Para cumplir con ella, los importadores deben unilateralmente hacer convenios con sus proveedores para que sean ellos los que incluyan las etiquetas, en caso de no llegar a un acuerdo, la marca de licor se dejará de vender en el país.
Los licores que ahora están en el mercado podrán venderse con las etiquetas actuales en un plazo no mayor a cuatro meses. Lo que lleva a los distribuidores a hacerse una pregunta ¿qué pasará con el stock que tienen?
Gerardo ha decidido incluso rebajar el precio de los licores que menos salida tienen para evitar pérdidas. Así por ejemplo, un whisky que hasta la semana pasada se vendía en $ 50 ahora lo deja en $ 40.
La transitoria segunda de la Resolución fija que cuatro meses después de publicada esta norma en el Registro Oficial no se podrá vender licor que no cumpla con el nuevo etiquetado nacional, aun cuando se haya importado de forma legal. Estas botellas serían retiradas y reexportadas. Sin embargo en el Servicio de Aduanas dicen que todavía hay tiempo y que la idea no es perjudicar a nadie.
El objetivo final es terminar o disminuir la distribución de alcohol importado ilegalmente, el cual, aseguran no es poco. Aduanas ha capturado y destruido 14.000 botellas de licor en lo que va del año.