Leonidas Iza y Jaime Vargas desisten de candidatura presidencial
Los líderes indígenas Leonidas Iza y Jaime Vargas, rostros visibles que canalizaron las protestas sociales en Ecuador en octubre del año pasado, anunciaron este jueves que dejan a un lado sus aspiraciones electorales para los comicios presidenciales de 2021.
En una comparecencia en la sede de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) en Quito, su presidente, Jaime Vargas, y el dirigente del Movimiento Indígena y Campesino de Cotopaxi (MICC), Leonidas Iza, manifestaron que no serán candidatos en un cartel electoral para las presidenciales y vicepresidenciales del próximo febrero en Ecuador.
Aunque en un primer momento habían indicado sus intenciones de concurrir como líderes de un movimiento de pueblos y nacionalidades originarias al que se sumarían diferentes sectores sociales como estudiantes, campesinos y trabajadores, ambos aceptaron la decisión de la formación política indígena Pachakutik que respalda a otro candidato, a la que dijeron apoyar.
La figura por la que se decanta el grupo político con representación en la Asamblea Nacional (Parlamento) es la del actual alcalde de la ciudad de Cuenca, Yaku Pérez.
"Pachakutik nace desde nuestra lucha y resistencia, es un proyecto político que busca cambiar toda la estructura política del país y tomar decisiones colectivamente y con la participación efectiva de nuestros pueblos y nacionalidades", afirmó Vargas en la comparecencia expresando así su respaldo a una lista única.
Pese a la retirada de sus aspiraciones, reiteró su llamamiento a la unidad y a sus acólitos pidió "caminar juntos", "la lucha no se ha terminado", aseguró.
Los dirigentes indígenas adelantaron la celebración de un Consejo Ampliado de la coordinadora indígena para la próxima semana para analizar la situación preelectoral.
Por su parte, Iza, líder carismático en las últimas protestas contra el Gobierno de Lenín Moreno de octubre pasado, defendió que "esa indignación que nos hace parecer desunidos, hay que convertirla en fuerza".
La protesta social del año pasado derivó en los disturbios más violentos que vivió el país en su historia reciente, y se inició en respuesta a un decreto que eliminaba los subsidios a la gasolina, que luego derogado por el presidente ecuatoriano.
En este contexto, con una importante acción callejera indígena y social, murieron una decena de personas y más de 1.500 resultaron heridas, de ellas 435 miembros de las fuerzas de seguridad.
Las organizaciones políticas en el país se encuentran en una semana clave en la que deben celebrar primarias y definir sus perfiles para las presidenciales y legislativas del 7 de febrero.
La candidatura de presidente y vicepresidente ganadora, tiene el mandato de gobernar el país entre mayo de 2021 y del 2025.