La seguridad ciudadana pasa a ser la prioridad del Gobierno, asegura Lasso
El presidente Guillermo Lasso anunció la noche de este lunes 15 de noviembre que él mismo asumirá la coordinación nacional de las fuerzas del orden y que desde ahora "la seguridad ciudadana pasa a ser la prioridad número uno del despacho presidencial".
"Así como en su momento dediqué mi tiempo a la vacunación, ahora lo dedicaré prioritariamente a la seguridad ciudadana", indicó el mandatario en un mensaje dirigido a la nación.
La alocución de Lasso ocurre casi tres días después de la más reciente masacre en la Penitenciaría del Litoral en la que 68 reclusos fueron asesinados, según cifras de la Fiscalía General del Estado y el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de Libertad (SNAI).
La matanza entre la noche del viernes 12 y la madrugada del sábado 13 de noviembre ocurrió en la misma prisión de Guayaquil donde en septiembre pasado se registró la peor masacre en la historia de las cárceles del país: murieron 119 reclusos.
La violencia en las prisiones, donde solo este año más de 324 reclusos han perdido la vida en enfrentamientos, se ha desbordado a las calles. Pese a un estado de excepción decretado hace casi un mes los asesinatos en el espacio público no han cesado, sobre todo en la ciudad de Guayaquil.
- Acuerdo Nacional por la Crisis Penitenciaria -
Durante esta jornada Lasso se reunió con las principales autoridades del Estado. Tras el encuentro se acordaron siete puntos en el denominado "Acuerdo Nacional por la Crisis Penitenciaria", entre ellos enviar el proyecto de Ley de Defensa Ciudadana.
Lasso dio más detalles esta noche sobre la propuesta. Indicó que en este documento se aprobarán las normas para el uso progresivo de la fuerza.
Además, adelantó que se tipificará un nuevo delito: autoría por dominio de organización, mediante el cual se buscará sentenciar a los jefes de las bandas, quienes "pagarán por los delitos que ordenen a sus cómplices", dijo Lasso.
El jefe de Estado precisó que no se trata de enfrentar a la delincuencia común, sino a grandes organizaciones con modernas infraestructuras "sofisticadas armas, complejas plataformas tecnológicas, y respaldadas por un músculo económico que rivaliza con los presupuestos de seguridad de muchos estados”.
Añadió que el combate al narcotráfico contará con el soporte de países como Estados Unidos, Israel, Colombia, Reino Unido, España, los cuales “nos han comunicado su firme voluntad de apoyarnos en la lucha contra esta amenaza. Lo mismo harán instancias supranacionales como las Naciones Unidas y la Unión Europea”.