La historia detrás de los murales más polémicos de Quito
En los últimos meses al menos tres murales de Quito han generado polémica en la opinión pública: el de los 'Jubilados' que será eliminado, el que tiene un Pikachú como protagonista y el que luce en la Prefectura de Pichincha.
"El arte es político y más aún en el espacio público", dice Daniela Chacón, exvicealcaldesa de Quito y especialista en políticas urbanas. Bajo su criterio, los murales generan polémica porque siempre hay grupos que se sienten ofendidos; sin embargo, ve vital su existencia para transmitir mensajes y marcar una agenda.
El ejemplo más claro de eso fue el mural ‘El amor no tiene género’, del artista Juan Sebastián Aguirre, más conocido como ‘Apitatán’. Su obra celebra la resolución de la Corte Constitucional del Ecuador a favor del matrimonio igualitario.
Inicialmente fue pintada en julio de 2019, en el sector de Bellavista, en el norte de Quito, pero terminó vandalizada. Finalmente se reubicó cerca de la Asamblea Nacional. Ese mural generó polémica de las personas que rechazaban la medida del matrimonio igualitario.
Mural con Pikachu
Okuda San Miguel es el autor detrás del mural polémico que contenía Pikachú. Las críticas se centraron en la fecha de inauguración de la obra, fue al rededor de la Batalla de Pichincha.
El Municipio de Quito se esforzó por aclarar que el mural no tiene relación con la fecha histórica, sino que era un homenaje a las mujeres tejedoras de Llano Grande.
Esta semana, en cambio, se viralizó un video en el que una persona lanza una bomba de pintura hacia el mural. La Agencia Metropolitana de Control (AMC) localizó a la persona que vandalizó la pintura y tomará acciones en su contra.
Eliminan el mural de 'Los jubilados'
Desde este jueves, 14 de julio, la ciudadanía mostró su preocupación porque pintaron de blanco parte de la obra de 'Los Jubilados', de Luigi Stornaiolo. El Municipio planteó como una solución la reubicación de la obra.
El inmueble presenta problemas de humedad y deterioro que requieren una intervención externa e interna, por lo que el Monasterio, lugar donde se exhibe la obra, decidió hacer trabajos de mantenimiento, lo cual implicaba intervenir la pared donde se encuentra el mural.
Las redes sociales criticaron que se retire un mural que ha sido identificativo en el centro histórico. Daniela Chacón dice que estos espacios se convierten en referentes para los turistas.
Una obra de casi un millón de dólares
La Prefectura de Pichincha dio mucho de qué hablar cuando se conoció que invirtieron $480.000 en un mural que recubre la cara oriental del edificio del Gobierno de Pichincha.
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La obra fue inaugurada en conmemoración de la Batalla de Pichincha. Su autor es el artista quiteño Pavel Égüez y representa la liberación de la nación y visibiliza la participación de las mujeres como protagonistas en el proceso libertario.
Una obra que enviste la Fiscalía
Pavel Égüez también es el autor de la obra que luce en la Fiscalía, llamada 'Grito de la Memoria'. Fue inaugurado durante el periodo del fiscal Galo Chiriboga, vinculado a actos de corrupción.
El mural contiene 5.500 piezas de cerámica. La obra se realizó como una "reflexión colectiva", según un comunicado de la institución, de lo que sucedió con el ‘Plan Cóndor’ aplicado en Latinoamérica en el contexto de la Guerra Fría, cuando se empleó una política estatal de represión y anti-insurgencia liderada por Estados Unidos para frenar el avance del modelo comunista de la que fue la Unión Soviética.
Los grafitis también comunican
Daniela Chacón dice que los grafitis son la muestra más contundente de que el arte contiene un mensaje político y social. Dice que los grupos sociales acostumbran utilizar estas expresiones para impregnar sus demandas en la ciudad.