Fragmentación del voto generó sorpresas electorales
Los resultados, en algunos casos, favorecen a candidatos que no aparecían en encuestas.
La fragmentación del voto en la jornada del domingo 24 de marzo de 2019 provocó varias sorpresas en los comicios seccionales, según analistas.
Alcaldías y Prefecturas ocupadas por personajes que no lideraban las encuestas llaman la atención del electorado. El triunfo de Jorge Yunda en Quito, de Paola Pabón como prefecta de Pichincha y de Yaku Pérez en Azuay son algunas de las sorpresas.
El resultado de las elecciones revela una gran fragmentación en el Ecuador, propia de un período de transición, según los analistas.
“Lo que genera, primero, esta fragmentación, se multiplican las candidaturas, hay un momento de incertidumbre y de reacomodo de las voluntades”, señaló Paulina Recalde, de Perfiles de Opinión.
“La excesiva cantidad de candidatos lo que provoca es una dispersión enorme. Al final, no siempre termina seleccionando a la persona más adecuada para los gobiernos”, dijo Santiago Basabe, analista político.
Lo sucedido es el resultado del alto porcentaje de indecisión que existió en estas elecciones, comentó el analista político Santiago Basabe.
“Y eso se resolvió en el momento mismo de la elección y allí se explica por qué buena parte de las encuestas realizadas en las semanas previas, al final fueron poco efectivas”, indicó Basabe.
Otro de los triunfos que llaman la atención son los de quienes no están vinculados a la política, como Pedro Palacios, en Cuenca; Javier Altamirano, en Ambato; y Delfín Quishpe, en Guamote.
Paulina Recalde, de Perfiles de Opinión, considera que las encuestas realizadas no fueron precisas por el porcentaje de indecisión, pero también otras por razones como el voto oculto y el voto vergonzante.
“Cuando queda muy asentada una supuesta verdad en varias ciudades de que tal candidato es inevitablemente el ganador, puede ser menos socialmente aceptable que se diga que se está votando por otras candidaturas”, manifestó Recalde.