Ecuador monitorea a 248 colombianos desplazados
Ministro de Defensa vaticina que habrá más desplazados desde el vecino país por conflictos
Un total de 248 ciudadanos colombianos permanece en la parroquia Palma Real de San Lorenzo, en la provincia de Esmeraldas, tras su desplazamiento desde Nariño, huyendo de enfrentamientos armados.
Distribuidos en 69 familias, un grupo de nativos del vecino país se encuentra en la casa comunal y otros en casas acogientes de esa localidad.
Esta situación motivó a una reunión del gabinete de seguridad, que se realizó en las instalaciones del ministerio de Defensa, en Quito. Al término del encuentro, Oswaldo Jarrín, titular de esta cartera de Estado, anunció un monitoreo, que permita tener una actualización en número, nombre y ubicación de los desplazados dentro de Ecuador y dar atención humanitaria por parte del Servicio Nacional de Gestión de Riesgos.
“Sabemos que va a haber un incremento por toda la actividad que se está teniendo en el combate a los grupos ilegales que están en Colombia, particularmente en el estado de Nariño”, vaticinó Jarrín.
En la cita participaron representantes de los ministerios del Interior, de Relaciones Exteriores, así como de la Secretaría de Gestión de la Política, del Centro de Inteligencia Estratégica y del Servicio Nacional de Gestión de Riesgos.
Palma Real, a 190 kilómetros al noroeste de la capital ecuatoriana, es una pequeña y empobrecida población cerca de la desembocadura del río Mataje en el océano Pacífico, en la frontera con Colombia.
La zona fronteriza entre ambos países, de unos 640 kilómetros que se extienden entre el Pacífico y la Amazonia, se ha convertido en escenario de permanentes conflictos que causan el desplazamiento de habitantes.