Correa dice que América Latina debe ponerle límites a capital especulativo
En su intervención, Correa dijo que Ecuador es uno de los países que redujo más la desigualdad.
Rafael Correa, aseguró hoy en Brasil que los países latinoamericanos deben ponerle límites al capital financiero especulativo, criticó la demora para implementar el Banco del Sur y desestimó la forma por la cual se calcula el crecimiento económico.
En una exposición en la Facultad de Derecho de la Universidad de Sao Paulo (USP), el presidente ecuatoriano hizo un repaso de las principales medidas económicas y educativas desde que asumió el poder en 2007.
Condecorado por la medalla y diploma de reconocimiento por su visita, el economista Correa defendió la presencia del Estado en la actividad económica y puso como ejemplo la disputa de Argentina con fondos buitre que reclaman por títulos de deuda en la justicia estadounidense, hecho al que calificó "atropello de soberanía".
"Es por eso que unidos nosotros los latinoamericanos le podemos poner las condiciones al capital financiero especulativo", afirmó Correa, quien expuso que en materia petrolera su gobierno modificó la ecuación 80 a 20 que le correspondía a las empresas y al Estado respectivamente, para 20 a 80.
En su disertación, Correa fue preguntado por un alumno sobre la creación del banco de los países Brics (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) y respondió sobre la necesidad de evitar un problema de "desaceleración de la integración".
En ese sentido criticó la falta de coordinación para poner en funcionamiento el Banco del Sur, que según Correa sería fundamental para unir parte de las reservas de los países y fomentar proyectos de infraestructura regional.
"Es un absurdo que los países latinoamericanos tengamos reservas en el exterior", enfatizó y apuntó a crear mecanismos con monedas de conversión para evitar el uso de dólar en el comercio regional.
El presidente ecuatoriano llegó hoy a Brasil donde visitó el polo tecnológico de Sao José dos Campos y se reunió en Sao Paulo con el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, a quien reivindicó como "un ejemplo de lucha para todos nosotros".
Correa apuntó que el principal problema de América Latina, históricamente, es la pobreza y cómo se la combate: "La pobreza no es fruto de la escasez como en la Edad Media. Es fruto de las perversas relaciones de poder donde pocos dominan o dominaban a casi todos".
Añadió que Ecuador es uno de los países que redujo más la desigualdad y sostuvo que "con la mejor distribución del ingreso se podría eliminar la pobreza en Suramérica, pero esto es un problema político
Durante su exposición, Correa colocó dudas sobre si el desempeño de los países debe medirse mediante la tasa de crecimiento.
"El mejor indicador es la lucha contra la pobreza y la desigualdad, no es la tasa de crecimiento por sí sola, puede haber crecimiento empobrecedor, con más inequidad. Hay cosas como el riesgo país que son barbaridades ideológicas y no científicas", declaró.
El mandatario defendió lo que llama "Socialismo del Siglo XXI" con la institución del Salario Digno "poniendo por delante del capital el trabajo humano", la eliminación de la tercerización en el mundo laboral y el acceso de los pobres a universidades de calidad.
Correa acusó a Estados Unidos por querer implementar en América Latina el "neocolonialismo" siendo parte de la Organización de Estados Americanos (OEA) y "sin firmar los instrumentos sobre derechos humanos como el Pacto de San José de Costa Rica".
Así, se quejó de que la comisión de libertad de expresión de la OEA lo cuestione y afirmó que en Brasil "el Partido de los Trabajadores (de la presidenta Dilma Rousseff) sufre ataques infames de los medios de comunicación que trabajan para hacerle creer a los pobres lo que le conviene a los ricos".
Dijo que algunos medios de comunicación a los que no identificó "buscan impunidad para manipular y hablan de autoritarismo cuando ya no pueden someter a gobiernos a sus caprichos e intereses".
El mandatario viajará a Brasilia para participar a partir de mañana de la reunión de la Comunidad de países Latinoamericanos y el Caribe (Celac) con China y de la Unión de Naciones Suramericana (Unasur) con los líderes de los Brics.