Choferes rechazan ser acusados de robos en buses interprovinciales
Protestan por el anuncio del Gobierno de enjuiciarlos como cómplices de los delincuentes cuando los vehículos a su cargo sean asaltados. Por el contrario los pasajeros respaldan la medida.
Protestan por el anuncio del Gobierno de enjuiciarlos como cómplices de los delincuentes cuando los vehículos a su cargo sean asaltados. Por el contrario los pasajeros respaldan la medida.
Las propias cifras confirman que se trata de un delito en aumento. Los asaltos y robos a buses en las carreteras generalmente ocurren cuando los delincuentes simulan ser pasajeros y desvalijan a todos.
Entre Guayas y Pichincha, en el 2010, se registraron 424 de estos delitos, pero para el 2011 la cifra aumentó a 540, es decir más de un 24% de aumento.
Por eso el último fin de semana se dijo que no habrá tolerancia para los choferes que permitan que esto ocurra.
Para ello, el presidente Rafael Correa, anunció que los buses interprovinciales tiene la orden de cerrar las puertas de sus unidades y no permitir que más pasajeros suban una vez que abandonen la terminal, algo que en la práctica casi nadie cumple.
Los choferes alegan que ellos no tienen cómo saber quien es ladrón y quién no.
A los conductores les preocupa que los puedan enjuiciar y dicen que no pueden dejar de recoger pasajeros en la ruta.
Los pasajeros, por el contrario, celebran esta medida y explican que andar en la carretera significa casi siempre exponerse, y dicen que muchas veces los choferes con complices de los asaltantes.
Pero como se aplicará esta medida es algo que aún no está claro.