Caso González: ¿Cómo ocurrieron los asesinatos y qué acciones se realizaron?
A las 07H00 del 19 de noviembre del 2003, en el piso de esta farmacia había ocho cadáveres.
Llegar a la sentencia del denominado caso González y otros (antes llamado Fybeca y Las Dolores) en uno de los hechos que ha concentrado las miradas del país ha conllevado casi 11 años de peregrinaje judicial. Revise a continuación un recuento de cómo ocurrieron los crímenes y cuál fue la actuación de las autoridades judiciales y políticas en esta última década.
A las 07H00 del 19 de noviembre del 2003, en el piso de esta farmacia había ocho cadáveres, y la Policía contaba que era el resultado de un enfrentamiento con un grupo de delincuentes que iba a asaltarla. No pasaron muchos minutos para que llegaran a la escena del crimen, Dolores Vélez y Dolores Briones a contradecir esta versión. El esposo de la primera compraba pañales para su hija de tres meses, y el cónyuge de la segunda Dolores era el mensajero de la farmacia.
Pero eso no era todo, un reportero gráfico captó una secuencia fotográfica en la que se observa cómo el exagente Erick Salinas se lleva esposado a quien luego Dolores Guerra identificaría como Johnny Gómez, su esposo. Cuando fue a preguntar a dónde se lo llevaron esto es lo que le dijeron: no han sido detenidos por ningún miembro de la Policía Nacional, porque no me han hecho llegar los partes ni han llegado esas personas acá en tal condición.
Un año después, los policías involucrados eran sobreseídos por la Corte Distrital que los juzgaba por mal procedimiento y uso irracional de la fuerza y de las armas.
La Comisión Anticorrupción, que investigaba el caso, determinó que lo ocurrido esa mañana no fue un enfrentamiento sino una ejecución; sin embargo, de nada serviría, pues para el sistema judicial el caso estaba cerrado. Y no solo para ellos, cuando las Dolores acudieron ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) acusando al Estado de ejecuciones extrajudiciales, el procurador de la época sostuvo que eso no era cierto.
Así transcurrieron los años, entre plantones y promesas de justicia que no llegaban, hasta que en el 2010 se ordenó la reapertura del proceso. De manera lenta, se fueron quemando las etapas, y hoy hay sentencia, se determinaron culpables, procedimientos incorrectos, se reconocen las ejecuciones, 13 días antes del undécimo aniversario.