Activistas de derechos humanos respaldan informe de la CIDH sobre cárceles en Ecuador
Una serie de reacciones se han generado hoy, jueves 17 de marzo del 2022, a raíz del informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) denominado ‘Situación de personas privadas de la libertad en Ecuador’. Este fue levantado con la información que recopilaron los técnicos de esa entidad durante la visita de trabajo que realizaron, del 1 al 3 de diciembre de 2021, en el contexto de la grave crisis penitenciaria.
El documento revela la existencia de una política que privilegia el encarcelamiento como medida para resolver los problemas de seguridad ciudadana, que resulta en un incremento del encarcelamiento durante los últimos años. También el abuso de la prisión preventiva, obstáculos legales y administrativos para conceder beneficios e indultos.
También hace referencia a la imposibilidad de garantizar la reinserción social a las personas privadas de la libertad. De igual forma, se advierte que la institucionalidad del sistema carcelario estaría debilitada por la disminución de su presupuesto, falta de personal técnico y de custodia, así como ausencia de políticas penitenciarias.
Vianca Gavilanes es coordinadora de la fundación Dignidad que brinda asistencia con las personas privadas de la libertad. Asegura que en diciembre del año pasado se reunió con los técnicos de la CIDH para evaluar y proporcionar información sobre la situación penitenciaria del Ecuador. “La construcción de mega centros de privación de libertad no soluciona el problema y desde el 2014 hasta la actualidad la población penitenciaria se incremento muchísimo”.
Coincide en que uno de los factores que influye en la crisis carcelaria es el abuso de la prisión preventiva. El reporte es bastante completo –acotó la activista- en relación a que no solo aborda los temas de seguridad, sino otros problemas que afectan la calidad de vida los internos en los centros de rehabilitación. “Para solucionar los inconvenientes del sistema penitenciario se debe hacer caso a lo que dice el informe porque recoge los aportes que realiza la sociedad civil”.
Para Sonia Andrade, activista de derechos humanos, el documento se acopla con los problemas que se vienen dando desde hace 10 años a escala nacional. Asimismo, la construcción de las mega cárceles fue un error. Cada provincia debería tener su propio centro de rehabilitación para atender a las personas que cometen delitos.
El reporte de la CIDH deja un precedente nefasto para el Estado porque se evidenció en la práctica lo que las autoridades que se hicieron cargo del sistema penitenciario hace más de una década fracasaron. “Antes hubo problemas, pero no en la misma magnitud que ahora”.
Simón Valdivieso es catedrático universitario y experto en temas de derechos humanos. Coincide en que los problemas en las cárceles son históricos. Lo único que ha cambiado es que ahora hay más bandas criminales en los centros penitenciarios que antes. Nunca hubo políticas penitenciarias claras y el trabajo se ha realizado sin planificación, por lo que ahora aparecen los resultados. “Lo que concluye la CIDH es una radiografía de lo que ha sucedido y los ecuatorianos tenemos en el presente”.