La Comisión Económica de la Asamblea quitó la garantía de pago a generadores privados en nueva ley de crisis energética

La Comisión de Desarrollo Económico quitó del proyecto de la ley económica urgente, remitida por el Gobierno para afrontar la crisis energética, la propuesta de crear una garantía de pago a los generadores privados por la energía que le provean al Estado.

Según el proyecto, la garantía se canalizaría a través de deuda pública o fideicomisos. Esto era un requerimiento de los interesados en invertir, el reflejo de la desconfianza histórica en la seriedad del Estado para pagar sus obligaciones, una expresión que ya ha sido manifestada antes por los gobiernos autónomos descentralizados, también por el IESS.

Le puede interesar El primer debate de la nueva ley energética se centrará en la importación de gas natural y la regulación de tarifas

La decisión de la comisión parlamentaria ocurre pese a que, dentro de un modelo monopólico de gestión energética del Estado, la garantía de pago es una necesidad para el privado.

La eliminación de las garantías del proyecto, que será debatido este domingo, se alínea con la intención manifiesta de mantener intacto el circuito del monopolio estatal.

Esta decisión es evidente porque aunque se amplie el límite de generación, incrementando teóricamente el número de proveedores, el cuello de botella se mantiene.

El mercado está amarrado, porque los usuarios no pueden elegir a quién les compra, porque no hay un escenario de libre compra y venta de energía.

Lea también: El Gobierno analiza aplicar un pico y placa eléctrico en Ecuador

Eventualmente, tarde o temprano, todo pasa por el Estado, su burocracia, sus ineficiencias y los intereses de los gobiernos de turno.

Eliminar la garantía de pago a los inversionistas en energía vuelve a dejar al país dando vueltas en círculos. Es revelador de que los cambios que se analizan en el Legislativo no implican reforman profundas.

La estructura se mantiene intacta, la estructura que mantiene hoy al país en la oscuridad.