Los contratos firmados no cubren el déficit de generación eléctrica en el país

Los cuatro contratos de emergencia que se firmaron, a inicios de agosto, para que Ecuador cuente con nueva generación eléctrica no cierran el déficit de generación eléctrica del país. Según la información de la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec), en el país hay equipos de generación instalados por 6400 megavatios y el consumo de electricidad, en las horas pico del día, llega a 4500. El problema es que no toda la capacidad de generación está disponible.

Las termoeléctricas producen entre 1100 y 1200 megavatios, con los 220 recuperados con reparaciones en este año; sin embargo, el 30% de los generadores instalados están fuera de operación.

En generación hidroeléctrica, el país cuenta con 4500 megavatios. Casi todos los equipos están en óptimas condiciones, pero estas plantas no pueden funcionar a plena capacidad porque dependen del agua de los ríos. Si el caudal se reduce, baja la generación. Es el caso actual de las hidroeléctricas del Paute que funcionan al 50%.

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Ese hecho es el que genera el déficit eléctrico, porque cuando las hidroeléctricas bajan hasta un 40% su producción, las termoeléctricas tienen que llenar el hueco y eso las lleva al límite de su capacidad.

Ese el riesgo es el que se quiere minimizar de dos formas: con la compra de energía que vendrá del barco turco que ya está en el país y con los equipos comprados que se instalarán en Quevedo, Esmeraldas y Guayaquil. En conjunto, producirán 341 nuevos megavatios de electricidad.

Las autoridades del sector eléctrico han anticipado que aun así no se superará el déficit de producción de energía del país.

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