Desalojados de Monte Sinaí se movilizaron para pedir ayuda a la Alcaldía de Guayaquil

Desalojados de Monte Sinaí se movilizaron para pedir ayuda a la Alcaldía de Guayaquil
14 may 2013 , 04:18
Redacción

Cientos de desalojados del Monte Sinaí se movilizaron para entregar su caso a la Alcaldía.

Durante la mañana, cientos de personas que fueron desalojadas de las Cooperativas Thalia 1 y 2 en el sector de Monte Sinaí, llegaron hasta el Municipio de Guayaquil para solicitar una audiencia con el Alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot.

 

Jefferson Valencia vive en la zona de desalojos en el noroeste de la ciudad. Llegó a la Plaza de la Administración de la Municipalidad de para entregar un pliego de peticiones. Ellos esperan que Nebot intervenga en los desalojos.

 

“El Alcalde es el único que puede ayudarnos porque el Gobierno no tiene la solución, nosotros estamos aquí, somos los ciudadanos, los moradores, no representamos a nadie, representamos a las familias, a nuestras casas, a nuestros derechos de vivir en paz”, manifestó Valencia.

 

Con carteles en mano y gritando consignas esperaban que se les de una audiencia. Una comitiva de 20 personas subió al despacho del primer personero municipal y le entregó una carpeta con pedidos y firmas de respaldo. Sin embargo, el alcalde Nebot explicó que el Municipio no tiene la facultad de intervenir en esos terrenos.

 

“Son dos haciendas que según el procurador son de propiedad privada, están en litigio y por lo tanto las leyes 37 y 88 de Legalización de Terrenos por parte del Municipio, no son aplicables”, señaló Nebot. 

 

Sin embargo, el Alcalde se comprometió a estudiar detenidamente la documentación que le proporcionaron, pero fue muy claro: “Yo no puedo violentar la ley, si a mí me dicen aquí que esto pertenece al Gobierno, el Municipio no puede legalizar, no puede intervenir y quien tiene que intervenir es el Gobierno Nacional. Expropiando, pagando y entregando escrituras, yo no puedo intervenir”.

 

Posteriormente los manifestantes acudieron hasta la Gobernación en donde un cordón policial evitó que se produzcan desmanes.