Uruguay no venderá marihuana legal a los turistas
"No queremos que esto sea un viva la Pepa", sostuvo Benjamín Liberoff, directo de Turismo.
El director de nacional de Turismo Uruguay, Benjamín Liberoff, indicó que los turistas no podrán beneficiarse de la ley de regularización de la marihuana, ya que solo podrán comprarla los residentes.
En una entrevista con la agencia Europa Press, el funcionario remarcó que la nueva legislación regula la producción y la venta de la marihuana y que es solo aplicable para las personas que viven en el país.
"No queremos que esto sea un viva la Pepa", sostuvo parafraseando al mandatario José Mujica.
En ese sentido, Liberoff subrayó que el Gobierno "no está promoviendo un tipo de turismo asociado a la marihuana, ni nada parecido" porque "no es el caso holandés".
Asimismo, descartó que el requisito de ser residente para comprar marihuana legal provoque una avalancha de solicitudes. "Uruguay tiene desde hace años una política de promoción de la residencia. Somos unos tres millones de personas en 176.000 kilómetros cuadrados, tenemos territorio de sobra para acoger", señaló, de todas maneras.
Liberoff admitió que las solicitudes de residencia se han disparado, pasando de las 2.800 que suele recibir anualmente de media a unas 6.000, según datos de la Dirección Nacional de Migraciones, pero remarcó que este incremento "no tiene relación" con la nueva ley, que fue aprobada hace dos semanas por el Senado uruguayo, previo paso por la Cámara de Diputados.
"Puede tener que ver con leyes como la del matrimonio igualitario, o con la tolerancia de la sociedad uruguaya, o con el crecimiento económico que hemos experimentado estos años", consideró.
Finalmente destacó que el objetivo de la norma jurídica es "combatir el flagelo del narcotráfico", sobre todo, "por el gran deterioro social que está provocando", si bien reconoció que se trata de "un ensayo". "Uruguay está asumiendo un reto, hay que decirlo, pero es que si siempre hacemos lo mismo no se pueden esperar resultados distintos", afirmó, y reconoció: "Nadie nos asegura que no nos estemos equivocando, aunque merece la pena probar".