Un avión se incendia al salirse de la pista de despegue en el centro de China
Un avión de la compañía Tibet Airlines se incendió en la mañana de este jueves en la pista de despegue del aeropuerto de la ciudad central china de Chongqing, informa la televisión estatal CCTV.
Según ese medio, el aparato se salió de la pista de despegue cuando efectuaba las maniobras para partir hacia Lhasa (suroeste) y se incendió.
Por ahora no se ha informado de víctimas, y vídeos publicados por la prensa local muestran varios camiones de bomberos tratando, con aparente éxito, de apagar el fuego.
Más de 40 personas resultaron heridas, todas ellas leves, y fueron trasladadas a dependencias médicas para su tratamiento, indicó el aeropuerto de Chongqing en su cuenta oficial en Weibo -el equivalente chino a Twitter, censurado en el país-.
Los vídeos también muestran a decenas de personas saliendo del avión y huyendo a través de la pista de aterrizaje, algunas de ellas relativamente cerca de la zona incendiada, que parece concentrarse en la parte delantera izquierda del aparato.
El rotativo hongkonés South China Morning Post explica que el incendio comenzó después de que uno de los motores rozase contra la pista mientras el aparato se desviaba de ella.
Según el diario oficial Global Times, 122 personas (113 pasajeros y 9 tripulantes) se encontraban en el avión en el momento del accidente, hacia las 08.00 hora local (00.00 GMT).
Todos ellos, apunta la publicación, fueron evacuados "de forma segura".
Las grabaciones muestran al avión -un Airbus A319-100 que llevaba en servicio nueve años y medio- totalmente pegado a la pista por su parte inferior, ya que no se ve el tren de aterrizaje.
Por el momento, Tibet Airlines solo indicó a la prensa local que estaba esperando a recibir más información sobre lo ocurrido y que se habían activado los "planes de emergencia de primer nivel".
Se ha abierto una investigación para esclarecer las causas del suceso.
Este no es el único accidente de aviación registrado en China recientemente, ya que el pasado 21 de marzo un Boeing 737-800 de China Eastern que cubría la ruta Kunming-Cantón se precipitó a tierra de forma abrupta, provocando la muerte de sus 132 ocupantes.
Ese incidente puso fin a una racha de casi 12 años sin accidentes graves de aviación en el país asiático.