Un padre israelí relata el momento cuando Hamás secuestró a su esposa e hijas

Yoni Asher es un hombre israelí cuya esposa y dos hijas pequeñas han sido tomadas como rehenes por Hamás, a raíz del ataque del grupo militante contra el país desde la Franja de Gaza durante el fin de semana.

El primer indicio que tuvo de que su familia estaba dentro de Gaza fue a través del rastreo del teléfono móvil de su esposa. Su esposa Doron y sus dos hijos, Raz, de 5 años, y Aviv, de 3, se estaban quedando con familiares cerca de la frontera con el enclave palestino cuando los milicianos atacaron.

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Yoni le dijo a la BBC: "El sábado, alrededor de las 10:30 de la mañana, fue la última llamada cuando hablé con mi esposa. Me dijo que terroristas de Hamas habían entrado en la casa (...) estaban en la habitación segura y luego se desconectó la llamada. Más tarde, logré localizar su móvil y estaba dentro de Gaza".

Más tarde ese mismo día, sus peores temores se confirmaron cuando reconoció a su familia en un video de personas siendo cargadas en la parte trasera de un vehículo.

"Son solo bebés. Ni siquiera son chicas. Son bebés", clamó Asher a quienes secuestraron a su familia, en otra entrevista con el canal TODAY.

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"Me dirijo a todos los que están dispuestos a escuchar, no importa si es la persona que las están reteniendo, o la comunidad nacional, o cualquier otra persona. El mensaje es que son bebés. Los bebés, las mujeres, las familias están fuera de los límites. No se pueden simplemente tomarlos, mantenerlos en cautiverio", señaló.

La desesperación por no conocer el paradero de sus familiares

"No sé en qué condiciones están detenidas. No sé si comieron lo suficiente, si sienten fríos o calor. Si están heridos, si están recibiendo el tratamiento adecuado. Es una situación, simplemente no puedes hacer este tipo de cosas", expresó.

Asher dijo que está enfocado en recuperar a su familia. "Las últimas 48 horas, no comí, no dormí, todo el tiempo hablando con los medios tratando de obtener nueva información", indicó.

"El primer día, nunca dejé mi teléfono ni un segundo, siempre traté de obtener nueva información, de alguna manera. Estoy tratando de crear conciencia a través de los medios de comunicación y mostrar las fotos de mi esposa, de mis niñas pequeñas y que la gente pueda ver que deberían estar en casa. No deberían ser mantenidos como prisioneros por Hamás".

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La embajada israelí en Estados Unidos dijo el domingo por la mañana que decenas de personas habían sido secuestradas.

Al menos 800 personas han muerto en Israel, incluidos 73 soldados, según el portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel, Daniel Hagari. Unas 560 personas han muerto en Gaza, según el Ministerio de Salud palestino. Más de 2.000 personas han resultado heridas en Israel y aproximadamente 2.900 han sufrido el mismo destino en Gaza.