Investigan vínculo terrorista con el avión perdido en Malasia
El italiano Marald y el austríaco Kozel aparecen entre los pasajeros pero ellos no viajaron.
Los equipos de rescate continúan hoy la búsqueda del avión de Malaysia Airlines que desapareció ayer en aguas del Golfo de Tailandia con 239 personas a bordo mientras las autoridades investigan una posible implicación de redes terroristas.
Agencias de inteligencia de varios países participan en una investigación que se centra en aclarar un cambio de rumbo que el avión realizó sin que el piloto lo comunicara ni enviara un mensaje de alerta y en la presencia de pasajeros con pasaportes falsos.
La Policía y unidades antiterrorismo analizan las imágenes de un circuito cerrado de televisión (CCTV) del aeropuerto de Kuala Lumpur en las que aparecen dos personas que embarcaron en el vuelo MH370 con pasaportes robados.
"Tenemos imágenes de CCTV de ellos desde la zona de registro hasta la de embarque y salidas", dijo en una rueda de prensa el director general del departamento de Aviación Civil, Azharuddin Abdul Rahman, según el diario "The Star".
El italiano Luigi Marald y el austríaco Christian Kozel aparecen en la lista de 227 pasajeros que viajaban de Kuala Lumpur a Pekín el sábado, pero ninguno de los dos se encontraba en Malasia ese día.
A Marald le robaron el pasaporte hace un año en Tailandia, donde pasa estos días, y Kozel se halla en Austria y, como al primero, le sustrajeron el pasaporte en Tailandia dos años antes, según han comprobado las autoridades.
Los dos impostores compraron los billetes con destino a Copenhague vía Pekín a China Southern Airlines -compañía con la que el vuelo de Malaysia Airlines estaba vinculado- en una única operación realizada con moneda tailandesa, informó la cadena CNN.
Azaruddin también señaló que cinco pasajeros del vuelo MH370 no embarcaron y que sus equipajes fueron retirados de la carga sin dar más explicaciones.
El ministro malasio de Defensa, Hishammuddin Hussein, dijo que también se sospecha de la identidad de otros dos pasajeros, mientras la agencia oficial china Xinhua informó de que el número de uno de los pasaportes de la lista de vuelo es de un chino que se encuentra en la provincia de Fujian.
El nombre que aparece en el documento es distinto al del titular de ese número, quien aseguró a Xinhua que su pasaporte jamás ha sido robado ni lo había perdido.
"Revisaremos todos los protocolos de seguridad y los reforzaremos si es necesario porque de momento no sabemos las causas del accidente", dijo el primer ministro malasio, Najib Razak.
La investigación también busca determinar porqué el avión dio media vuelta antes de desaparecer, tal como recogieron los radares, según dijo el jefe de las Fuerzas Aéreas, el General Rodzali Daud.
"Estamos intentando encontrar un sentido (a la maniobra) que hemos podido corroborar en los radares (...) No obstante, no hubo ninguna señal o llamada de emergencia del piloto, lo que nos tiene igualmente intrigados", indicó Rodzali.
El ministro de Defensa dijo que las autoridades estudian todas las posibles razones para un giro de este tipo, sin descartar la de un ataque terrorista.
"La desaparición del MH370 no es algo que podamos tomarnos a la ligera y no podemos descartar ninguna posibilidad. Las agencias de inteligencia de países relevantes han sido informadas y compartiremos la información a medida que la investigación avance", dijo Hishammuddin.
El inspector general de la Policía malasia, Khalid Abu Bakar, evitó atribuir el suceso a un ataque terrorista aunque no descartó esta opción.
Estados Unidos ha enviado un equipo de expertos del Consejo Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) junto a técnicos de Boeing, y de la Administración Federal de Aviación (FDA) para ayudar en la investigación.
También viajarán a Malasia agentes del FBI, que participa en la investigación porque viajaban ciudadanos estadounidenses a bordo del avión (tres, según la aerolínea) y no descarta el terrorismo ni ninguna otra causa.
Tras corroborar la maniobra del avión las autoridades ampliaron la zona de búsqueda en aguas del Golfo de Tailandia en una operación en la que participan 22 aviones y 40 embarcaciones de Malasia, Vietnam, Singapur e Indonesia.
Hishammuddin confirmó la presencia de manchas de aceite en el mar entre Malasia y Vietnam pero subrayó que, de momento, no se ha encontrado ningún resto del avión.
La prensa local y redes sociales divulgaron imágenes de manchas de aceite y supuestos restos del B-777 en el mar tomadas por un pasajero chino de otro vuelo de Malaysia Airlines que aterrizó por la mañana en Kuala Lumpur procedente de Pekín.
Las imágenes muestran escombros flotando en el mar a unos 90 minutos de vuelo del aeropuerto malasio, según el portal "Malaysia Insider".
El vuelo MH370 despegó de Kuala Lumpur a las 00.41 hora local (16.41 GMT del viernes) y tenía previsto llegar a Pekín unas seis horas más tarde.
Las autoridades de Aviación Civil malasias indicaron que su última posición en el radar antes de que se perdiese la señal fue a las 01.30 hora local del sábado (17.30 GMT del viernes).
Malayisa Airlines había informado inicialmente de que la torre de control de tráfico aéreo de Subang perdió el contacto con el avión a las 02.40 hora local.
El piloto del 777 es un malasio de 53 años de edad y con 18.365 horas de vuelo de experiencia, que ingresó en Malaysia Airlines en 1981, según datos de la propia compañía.
El director general de Malaysia Airlines, Ahmad Jauhari Yahya, dijo que pondrán aviones de la compañía a disposición de las familias para que viajen hasta Kuala Lumpur.
"Nuestra prioridad en este momento es cuidar de las familias", dijo.