El secretario de Estados Unidos reconoce la victoria de Edmundo González
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, emitió un comunicado en el que asegura que Washington concluye, basándose en “pruebas abrumadoras”, que el opositor Edmundo González fue el verdadero ganador de las elecciones presidenciales del 28 de julio en Venezuela.
Blinken enfatizó la necesidad de que todos los partidos venezolanos se comprometan a iniciar una transición hacia la democracia y expresó la disposición de Estados Unidos para apoyar este proceso junto con sus aliados internacionales.
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Según el secretario de Estado, las evidencias obtenidas señalan irregularidades significativas en el proceso electoral, lo que ha llevado a la administración estadounidense a tomar esta postura. Blinken afirmó que este proceso electoral debe reflejar la voluntad del pueblo venezolano.
Paralelamente a las declaraciones de Blinken, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, mediante su red social X (antes Twitter) propuso este jueves “retomar” las negociaciones con Estados Unidos.
Sin embargo, Maduro condicionó cualquier posible contacto al “cumplimiento” de un memorando de entendimiento firmado en septiembre del año pasado durante las negociaciones directas entre Venezuela y Estados Unidos en Catar.
Este memorando también estuvo vinculado a un proceso de diálogo entre el chavismo y la oposición en Barbados, que buscaba allanar el camino hacia las elecciones presidenciales.
La situación electoral en Venezuela es compleja. Las autoridades electorales venezolanas anunciaron la noche del pasado domingo que, con el 80% de los votos escrutados, el ganador había sido Nicolás Maduro con un 51,2% de los sufragios.
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Desde entonces, no se ha provisto un escrutinio completo, lo que genera sospechas de fraude por parte de Estados Unidos. La administración estadounidense había mostrado cautela hasta conocer los datos pormenorizados por mesa electoral, que Caracas no ha entregado.
La comunidad internacional observa con atención el desarrollo de los acontecimientos en Venezuela, esperando que se respete la voluntad popular y se garantice un proceso democrático transparente. La postura de Estados Unidos y la respuesta de Maduro podrían definir el rumbo de las relaciones bilaterales y la estabilidad política en la región en los próximos meses.