España busca superar la crisis pese a negativo diagnóstico del FMI
El Gobierno español subrayó hoy que su política económica está encaminada a intentar evitar que se cumplan las negativas previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) para la economía del país, al señalar que esos pronósticos "no están escritos en bronce" .
El Gobierno español subrayó hoy que su política económica está encaminada a intentar evitar que se cumplan las negativas previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) para la economía del país, al señalar que esos pronósticos "no están escritos en bronce" .
"El Fondo Monetario Internacional (FMI) lo que ha hecho es bajar las proyecciones de crecimiento económico en todas las zonas del mundo", afirmó hoy el ministro español de Economía, Luis de Guindos, durante la reunión del consejo de ministros de Finanzas de la Unión Europea (UE) celebrado en Luxemburgo.
Afirmó que lo que el FMI "ha venido a decir fundamentalmente es que hay una desaceleración económica relativamente sincronizada, relativamente homogénea, que lógicamente es más intensa en la zona del euro".
El FMI pronosticó que la economía española se contraerá el 1,5% en 2012 y el 1,3% en 2013, y que cerrará este ejercicio con un déficit del 7 % del PIB, que en 2013 será del 5,7 %, por encima de las cifras exigidas por la UE, al tiempo que alertó de que los problemas de los periféricos afectan cada vez más a otros países.
"En lo que trabaja el Gobierno español es en intentar evitar que se produzcan esas proyecciones y para esto está poniendo en marcha toda la política económica" impulsada recientemente con el plan de reformas, el saneamiento de la banca y un ajuste presupuestario "sensato, sensible y ajustado a las circunstancias económicas del país", subrayó.
De Guindos recordó que el Gobierno español pronosticó para 2012 inicialmente una caída del -1,7 % del PIB y después la revisó ligeramente al -1,5 %, coincidiendo con el FMI, además de señalar que los datos del tercer trimestre ponen de manifiesto que la proyección de España para el conjunto del año es "prudente".
Consideró que las previsiones tienen "una cierta holgura" con respecto a lo que puede ser el resultado final del PIB español.
"Por tanto, no creo que el Gobierno haya sido excesivamente optimista en la proyección de este año", sostuvo.