La corriente El Niño, tercera más intensa de la historia, durará hasta 2016
En los últimos 65 años sólo se ha registraron tres episodios fuertes.
El fenómeno climatológico de El Niño, que reapareció en marzo, durará hasta la primavera boreal de 2016 y podría ser uno de los más intensos de la historia, según las proyecciones anunciadas este jueves por el Centro de Previsión del Clima (CPC) de Estados Unidos.
Desde marzo la temperatura sobre la superficie de las aguas ecuatoriales del Pacífico aumenta, lo que hace que haya "cerca de un 95% de posibilidades de que El Niño persista durante el invierno 2015-16 en el hemisferio norte, antes de perder gradualmente su intensidad hasta primavera", precisa el CPC.
La temperatura en algunas zonas ecuatoriales del Pacífico en septiembre es de 2,1 grados Celsius por encima de lo normal, precisó en una teleconferencia de prensa Mike Halpert, director adjunto de la Agencia Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA).
Este ascenso de la temperatura en el periodo de junio a agosto sitúa a El Niño de este año en el tercer lugar en intensidad, desde el comienzo de las observaciones y los recuentos de la corriente marina en 1950, precisó.
En los últimos 65 años sólo se ha registrado una intensidad de recalentamiento superior en tres ocasiones: 1972-73, 1986-88 y 1997-98.
El único impacto notable del regreso de El Niño por el momento es una reducción en el número de huracanes en el Atlántico Norte durante la temporada de 2015, que tiene un 90% de probabilidades se ser menos activa de los habitual.
La corriente de El Niño crea un fenómeno que apacigua las tormentas tropicales. En revancha, El Niño intensifica la formación de tempestades en el este y en el centro del Pacífico.
Pero el gran beneficiario del regreso de El Niño debería ser Estados Unidos: según el CPC, las precipitaciones deberían ser más abundantes de lo normal este otoño y durante el invierno en gran parte del país.
El estado de California (costa oeste), atormentado por una intensa sequía desde hace cuatro años, podría recibir precipitaciones significativas.
Otros países, sin embargo, deben ser mas previsivos. Perú, por ejemplo, renunció a acoger el Rally Dakar-2016 y dio prioridad a prevenir el impacto que el fenómeno El Niño pueda causar en el país.