Bogotá vivió una jornada de disturbios
En Bogotá, una serie de protestas dejaron un saldo de 147 heridos.
En Bogotá, una serie de protestas dejaron un saldo de 147 heridos, "algunos por golpes de piedra y otros por asfixia" luego de enfrentamientos entre policía y manifestantes en distintos lugares de la ciudad, según reportes de las autoridades locales citados por medios locales.
La capital colombiana fue testigo este jueves de varias manifestaciones antigubernamentales.
Grupos de productores agrarios, estudiantes, transportadores y otros empleados participaron en marchas para exigir mayor apoyo del gobierno a sus actividades económicas, criticar propuestas de reforma educativa y exigir la suspensión de los tratados de libre comercio, entre otros.
Los disturbios y bloqueos a carreteras que se presentaron en Soacha, un municipio ubicado inmediatamente al sur de la capital, hicieron que las autoridades decretaran ahí un toque de queda para la noche de este jueves.
También se reportaron enfrentamientos en torno a la céntrica Plaza de Bolívar.
La policía indicó la detención de 10 personas, según informa la prensa local.
"El paro tiene tres componentes: campesinos, estudiantes y vándalos a servicio de los terroristas de las Farc y sus afiliaciones políticas", denunció el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón.
"Aquellos que participaron de marchas de manera pacífica y responsable, un reconocimiento, la democracia colombiana lo permite", dijo Pinzón.
“Pero no vamos a permitir que un puñado de criminales quiera desestabilizarnos”, advirtió el ministro, quien anunció un aumento de la presencia militar en varias ciudades, "para garantizar la seguridad de los ciudadanos".
Por su parte, el alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, decretó un toque de queda en varias localidades del sur de la ciudad. La medida estará en vigencia desde las 20:30 de este jueves hasta las 5:00 del viernes.
Según el corresponsal de BBC Mundo en Bogotá, Arturo Wallace, las protestas que se iniciaron hace varios días en el departamento de Boyacá y otras zonas rurales del país, han venido aumentando su impacto en la capital bogotana.
"Numerosas vías siguen bloqueadas en el vecino departamento de Boyacá, lo que complica las salidas y entradas a la ciudad y, sobre todo, ha aumentado sensiblemente el precio de varios alimentos", asegura nuestro corresponsal.
"El campo se está haciendo sentir, como nunca antes. Y el gobierno, que negocia frenéticamente, parece dispuesto a hacer concesiones que hace una semana parecían impensables", agrega Wallace.
Los organizadores de la protesta habían llamado a manifestarse de forma pacífica, y de esa forma transcurrió la mayor parte de la marcha de este jueves.
Pero en las primeras horas de la tarde estalló la violencia en el centro de Bogotá en forma de encontronazos entre grupos de estudiantes encapuchados y los escuadrones antidisturbios de la policía.
A lo largo del paro agrario la actuación policial ha sido objeto de un cuidadoso escrutinio y numerosas críticas, pues se han documentado varios abusos en el marco de sus esfuerzos por mantener despejadas las vías.
Pero en este caso la violencia parece haber sido iniciada por un pequeño grupo de estudiantes, indica nuestro corresponsal.
Al final, los encontronazos y el uso de chorros de agua y gases lacrimógenos por parte de la policía terminaron despejando la Plaza de Bolívar, que había llegado a concentrar a cerca de 8.000 personas.
Y también resultaron afectados los comercios de la zona y el sistema de transporte masivo de Bogotá, conocido como Transmilenio.