Las 3 opciones militares que tiene Estados Unidos ante el desafío de Corea del Norte
Se utilizarían despliegues que hace ya tiempo están posicionados.
Supuesta foto del último lanzamiento de un misil norcoreano, distribuida por el régimen.
Pero, ¿cómo sería una acción militar contra el régimen de Kim Jong-un?
A los cuando el misil balístico surcó por sus aires.
El lanzamiento fue un de que se trataba sólo de un "primer paso".
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) y varios países estudian nuevas sanciones a Corea del Norte al mismo tiempo que Trump anunciaba estar evaluando qué hacer a continuación.
El régimen de Kim Jong-un tiene una de los ejércitos menos transparentes del mundo
Pero, si bien Estados Unidos cuenta con una capacidad militar sin igual, la gama de alternativas que podría usar contra esta nación hermética es, en realidad, limitada.
Esta es la opción menos arriesgada pero discutiblemente menos efectiva.
Simplemente se utilizarían despliegues que hace ya tiempo están posicionados pero que han tenido y que el programa nuclear norcoreano avanzara.
Estados Unidos podría mover más efectivos terrestres a
O usar defensas terrestres como el polémico sistema Thaad, artillería pesada y vehículos blindados para
Estados Unidos y Corea del Sur realizan cada año ejercicios militares que Piongyang considera una provocación.
Sin embargo, Corea del Sur paralizó el despliegue actual del Thaad y, pues le preocupa provocar a su vecino del norte.
En efecto, vista la reacción de Corea del Norte ante los ejercicios binacionales que los ejércitos estadounidenses y surcoreanos realizan cada año, es casi seguro que interpretaría los movimientos antes mencionados
Sin duda, China y Rusia también protestarían con vigor y ellos sí tienen el poder necesario para complicarle la vida al gobierno de Trump en otras áreas como Europa del Este o los mares del sur y del este de China.
La Marina estadounidense podría aumentar su presencia alrededor de la península coreana enviando y, posiblemente, desplegando un segundo grupo de combate.
En paralelo a las alternativas navales, la aviación de EE.UU. podría reforzar su potencial aéreo directo con más escuadrones de ataque, tanques de apoyo, aviones de vigilancia y bombarderos pesados en sus bases de Guam, Corea del Sur y Japón.
No obstante, tanto la que están sintiendo el impacto de más de una década de despliegues continuos de alta intensidad con los que ha servido de apoyo a operaciones como las de Irak y Afganistán.
Pero aun más importante, tal vez, es que el , ya que un incremento de la presencia militar de EE.UU. por sí solo no le forzaría a cancelar su programa de armas nucleares, que crece con rapidez, ni sus pruebas con misiles.
Y cualquier declaración que intenciones de derribar estos misiles norcoreanos que traspasan su espacio aéreo hacia el de otros países requeriría de por sí un mayor incremento de las fuerzas navales estadounidenses alrededor de la península.
La Marina y la Fuerza Aérea de EE.UU. están sintiendo el impacto de más de una década de despliegues continuos.
Piongyang tiene un
Y los . A esto se suma que cada barco cuenta con sólo unos pocos.
Por lo tanto, Corea del Norte podría que quedaría vulnerable y obligada a volver a puerto.
Una política como esta representaría un , así como una escalada peligrosa hacia un conflicto militar directo.
Las fuerzas aéreas y navales de EE.UU. poseen las
A primera vista, puede parecer una propuesta atractiva disparar misiles de precisión Tomahawk desde submarinos en la costa norcoreana y atacar con bombarderos furtivos (indetectables para los radares) B-2
Corea del Sur rechaza el incremento de tropas estadounidenses en su territorio por temor a la reacción de Kim Jong-un.
Sin duda, se podría infligir graves daños a objetivos de gran valor, ya que existen , de 13,6 toneladas.
El peligro inmediato para los aviones estadounidenses dependerá de muchos factores que incluyen el grado de advertencia recibido por Corea del Norte, el número de ataques lanzados y la contribución de aviones detectables por radares dentro del alcance de sus defensas.
Sin embargo, el , ya que son una mezcla de sistemas de radares y misiles aéreos chinos, soviéticos y de fabricación local, algunos de los cuales datan de hace al menos 50 años.
Tiene una de las fuerzas de seguridad menos transparentes del planeta, que han sido , y su rapidez para reaccionar es difícil de valorar.
Si Estados Unidos llegara a perder aviones por culpa del fuego enemigo o por algún accidente, tendría que enfrentarse a la pesadilla de verse obligado a intentar rescatar a su tripulación o abandonarlos a un destino, que acabará siendo bastante mediático.
El lanzamiento del misil causó conmoción en Japón.
Aun más relevante, sin embargo, es el hecho de que incluso si los ataques a instalaciones nucleares o de misiles, a centros de mando o de liderazgo tuvieran éxito, esto no evitaría que Corea del Norte tomara represalias.
Su ejército todavía tendría la capacidad de
Esto consistiría en más de un millón de soldados y, según algunas estimaciones, más de 6 millones de reservistas y tropas paramilitares.
Un gran número de elementos de artillería, la mayoría de ellos instalados cerca de la zona desmilitarizada, incluyen centenares que hogar de alrededor de 10 millones de personas.
Hasta a los militares estadounidenses les tomarían días eliminar por completo estas baterías, que son capaces de disparar decenas de miles de proyectiles y misiles durante todo ese tiempo.
El daño catastrófico que estas baterías podrían causar en una ciudad moderna y llena de gente, así como en las fuerzas militares surcoreanas, es el motivo por el que el Seúl se opone a cualquier acción militar preventiva contra Corea del Norte.
Estados Unidos tiene misiles antibalísticos muy caros, por lo que usarlos contra Piongyang no sería nada económico.
Incluso sin un arma nuclear utilizable y sin invadir de forma enérgica Corea del Sur, el régimen de Kim podría ocasionar muchos perjuicios y, probablemente, la
Dado el tamaño del ejército de Kim Jong-un, el poder de su artillería, la opacidad de sus defensas aéreas y la reticencia de Corea del Sur a apoyar cualquier acción militar estadounidense, está opción sería extremadamente disparatada.
Cualquier intento de invadir Corea del Norte requeriría meses de un incremento de la presencia militar de EE.UU. en la zona, una y una forma de garantizar la neutralización de las misteriosas capacidades nucleares de Pyongyang.
También costaría cientos de miles de vidas a ambos bandos.
Además de los bombardeos de artillería, el ejército usando biplanos que vuelan despacio y a baja velocidad, difíciles de detectar por los radares, barcos y submarinos pequeños..
Esto se sumaría al caos y a la pérdida de vidas en caso de un conflicto de grandes dimensiones y aseguraría que los cuerpos menos numerosos pero más avanzados tecnológicamente de EE.UU. y Corea del Sur se amoldarían dolorosamente hasta hacerse más delgados.
La última vez que Estados Unidos y sus aliados se adentraron en Corea del Norte, durante la guerra de 1950, China entró en el conflicto a favor del bando norteño para
Ninguna de las tres opciones militares está libre de costos ni riesgos.
Un resultado así todavía es algo que China no está preparada para contemplar. Esta constituye ladurante tanto tiempo.
Por último, incluso si estos grandes problemas se pudieran superar de alguna manera, una invasión exitosa de Corea del Norte liderada por EE.UU. le dejaría a Seúl
Corea del Norte ha existido en un estado incomparable de
En comparación, la tarea monumental unificar Alemania después de la Guerra Fría palidece.
La realidad es que ninguna de las opciones militares disponibles para que Estados Unidos lidie con Corea del Norte
Son elementos que habrá que considerar y sopesar con las posibles consecuencias inciertas y problemáticas.