Alberto Fernández imputado por presunta violencia de género contra Fabiola Yáñez
El expresidente argentino, Alberto Fernández, fue imputado por el fiscal federal Ramiro González por presuntas lesiones graves y amenazas coactivas en perjuicio de su expareja, la ex primera dama Fabiola Yáñez.
La acusación se basa en la denuncia presentada por Yáñez, quien relató haber sufrido violencia física y psicológica durante su relación con Fernández, en un contexto que calificó de violencia machista e intrafamiliar.
La imputación se realizó el miércoles pasado, y González ya ha solicitado la recolección de pruebas iniciales, incluyendo fotografías y conversaciones que fueron halladas en el teléfono de la secretaria de Fernández.
Estas pruebas forman parte de una investigación más amplia sobre supuestos actos de corrupción en la contratación pública durante la administración de Fernández (2019-2023).
En su dictamen, el fiscal González detalló las acusaciones de Yáñez, quien afirmó haber sido víctima de un patrón de acoso psicológico y agresiones físicas que se intensificó tras la elección de Fernández como presidente en 2019.
Yáñez declaró desde Madrid, donde actualmente reside, y describió una relación marcada por una asimetría de poder exacerbada por el cargo político de Fernández.
Entre los actos de violencia detallados en la imputación, Yáñez mencionó que en 2016 Fernández la coaccionó para que abortara, ejerciendo un control psicológico que le causó un daño psíquico profundo.
Además, en varios episodios ocurridos en 2021, Fernández presuntamente la agredió físicamente en diversas ocasiones: sujetándola del brazo, propinándole un golpe en el ojo y una patada en el vientre, a pesar de que sospechaba que podría estar embarazada.
Las denuncias también incluyen un episodio en el que Fernández la habría sacudido fuertemente, provocándole lesiones en los brazos y el cuello.
Durante el primer semestre de 2023, según la imputación, el expresidente la golpeaba regularmente con la mano abierta, lo que llevó a Yáñez a mudarse con su hijo a otra residencia dentro del complejo de Olivos, mientras Fernández continuaba ingresando de manera violenta.
El proceso judicial apenas comienza, y se espera que en las próximas semanas se realicen nuevas diligencias para avanzar en la investigación. El caso generó gran atención pública debido a las implicaciones políticas y personales de las acusaciones contra un expresidente.