China critica a la OTAN y exige fin de mentalidad de Guerra Fría
La embajada de China en la Unión Europea instó a la OTAN a "abandonar la mentalidad de guerra fría", después de que el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, acusara a Pekín de apoyar la economía de guerra rusa contra Ucrania y de facilitar el mayor conflicto reciente en Europa.
En un comunicado publicado en la página web de la embajada, el portavoz de la misión diplomática en Bruselas destacó que China "no es responsable de la crisis en Ucrania" y reafirmó su compromiso con la promoción del diálogo y la búsqueda de una solución política, una postura respaldada por la comunidad internacional.
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El comunicado también subrayó que China mantiene una política estricta de no proporcionar armas letales a ninguna de las partes en conflicto y de controlar rigurosamente la exportación de bienes de doble uso, incluidos los drones civiles.
Además, la embajada argumentó que el flujo comercial normal entre China y Rusia no tiene como objetivo a terceros y no debería ser objeto de interrupciones o coacciones.
Llamada a la OTAN para la paz y estabilidad
China instó a la OTAN a "escuchar atentamente a la comunidad internacional y a prestar atención a las voces justas", en lugar de "buscar chivos expiatorios".
El comunicado señaló que la OTAN debería reflexionar sobre sus acciones y tomar medidas concretas para desescalar la situación y resolver los problemas actuales. Además, la representación diplomática enfatizó que la región de Asia-Pacífico está destinada al desarrollo pacífico y no debe convertirse en un campo de lucha geopolítica.
El mensaje de la embajada pidió a la Alianza Atlántica que se adhiera a su "naturaleza defensiva y regional" y que evite ser un factor de perturbación para la paz y la estabilidad en Asia-Pacífico.
De la misma manera, aconsejó a la OTAN dejar de "exagerar la supuesta amenaza china" y de "provocar confrontaciones y rivalidades", sugiriendo que la alianza debería hacer más para contribuir a la paz y la estabilidad mundial.
Por su parte, Jens Stoltenberg, hablando en nombre de los líderes de la Alianza reunidos en Washington, advirtió que "China no puede facilitar el mayor conflicto en Europa en la historia reciente sin que eso afecte negativamente sus intereses y su reputación". Sin embargo, no proporcionó detalles sobre las posibles repercusiones.
Desde el inicio del conflicto en Ucrania, China mantiene una posición ambigua, abogando por el respeto a la integridad territorial de todos los países, incluido Ucrania, y por las "legítimas preocupaciones de seguridad" de todas las partes, en referencia a Rusia.