Ecuador ya supera a Brasil en número de reos muertos en masacres carcelarias

Tras casi dos años, la crisis carcelaria en Ecuador aún no termina. Este lunes ocurrió la tercera masacre en lo que va de 2022; la cárcel de Santo Domingo se convirtió en el nuevo epicentro de la violencia dejando a 12 reos brutalmente asesinados.

Con esta nueva tragedia el país engrosa la cifra de reos muertos bajo la tutela del Estado, entre 2021 y lo que va del año, 420 privados de libertad han fallecido en contexto de la violencia en los centros, según datos del Servicio Nacional de Atención a Privados de la Libertad (SNAI).

Pero, la crisis carcelaria en Ecuador ¿es la peor de América Latina? ¿qué pasa en otros países de la Región?

Lo cierto es que las cárceles Latinoamericanas comparten crisis: el hacinamiento y la violencia describen el perfil común de los centros penitenciarios de la Región. Sin embargo, lo que vive actualmente Ecuador podría ser un espejo de lo que ya ocurrió en México y Brasil.

Ese es el diagnóstico del argentino Gustavo Fondevila, académico del Centro de Investigación y Docencia de México (CIDE), quien ha estudiado de cerca las prisiones de Latinoamérica. “Es el mismo fenómeno que ocurrió en México cuando empezaron las guerras entre carteles por narcotráfico y en Brasil entre pandillas carcelarias”, explica.

Así, bajo su visión, el número de PPL fallecidos son los más altos de la Región "porque Ecuador tiene una población chica en comparación a otros países". Hasta mayo de 2022, Ecuador tenía una población carcelaria de 33.510 personas privadas de libertad y se registra 420 muertes desde 2021. Es decir, que por cada 1.000 reos en el país mueren 12,5 internos.

Si se analizan las muertes en el contexto carcelario en Brasil, dice Fondevila, no supera los 400 reos muertos. Sin embargo, puntualiza que este país tiene una población carcelaria de 811.707 PPL, la más grande de América Latina, por delante de México, Colombia y Argentina que, son otros de los países con el mayor número de internos, según un estudio realizado por el Instituto para la Investigación de Políticas de Justicia y Crimen (ICPR).

“Comparando proporcionalmente con la población carcelaria, Ecuador lleva la triste delantera en la cantidad de muertes”, señala.

Con ello concuerda Daniel Pontón, decano de la Escuela de Seguridad y Defensa del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN) y experto en cárceles, él escala la hipótesis y añade que por la frecuencia y por el número de reos fallecidos, el Ecuador podría cargar sobre sus hombros "la peor crisis penitenciaria del mundo".

De hecho, en 1992, ocurrió una de las peores masacres carcelarias en Brasil, en un motín en Carandirú, dejando a 111 reos fallecidos. Mientras que, en 2021, en la Penitenciaría del Litoral, se registró la matanza más grande en Ecuador, donde 118 PPL fueron asesinados.

Pero, ¿los Gobiernos de Brasil o México han logrado contener la crisis carcelaria?

La respuesta es que no, ambos son países que actualmente no han logrado librarse de la crisis carcelaria, "cada seis meses, ocho meses, un año, cuando ese equilibrio entre las pandillas se rompe tenemos un enfrentamiento en un centro penitenciario que deja con 30, 40 muertos y el país se levanta con las mismas imágenes con las que se levantó Ecuador", subraya.

El nivel de violencia no sorprende a Fondevila. Decapitados, mutilados, cortados y hasta quemados son la firma de estas matanzas no solo en Ecuador también en otros países.

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De hecho, la violencia en esta última masacre fue brutal. Según el ministro Carrillo se levantaron 45 piezas humanas en el CPL de Santo Domingo, lo que complicó identificar el número de cadáveres, pues primero se reportaron 13 y luego se ratificó que eran 12 fallecidos.

Patricio Carrillo, ministro del Interior, al hacer una evaluación de la nueva masacre, lamentó el "perfil psicológico" de los asesinos. Sin embargo, Fondevila discrepa con ese diagnóstico, "son mensajes entre pandillas, un mensaje político al otro grupo, en Brasil también suceden este tipo de ejecuciones crueles y brutales. En México son el sello de los carteles mexicanos", describe.

"Las prisiones en América Latina dejaron de ser una medida de incapacitación para las personas que presuntamente han cometido crímenes; se convirtió en un mecanismo promotor de violencia ", Gustavo Fondevila, académico.

Para el experto lo más probable es que las masacres continúen. Fondevila advierte que es urgente repensar la cárcel por completo desde sus orígenes y funciones, en México y Brasil, las masacres carcelarias ya son parte del paisaje, una realidad que cada vez es más cotidiana también en Ecuador.