De Ecuador a Gambia: ¿Por qué África sería el nuevo destino estratégico para el envío de droga?
Gambia, situado en la costa occidental de África y uno de los países más pequeños de ese continente, no pasa desapercibido en el mundo del crimen organizado.
El destino cobró relevancia en la madrugada de hoy, 20 de marzo de 2024, cuando un operativo conjunto entre la Policía Nacional y la Agencia de Aplicación de la Ley sobre Drogas de Gambia se llevó a cabo en las provincias de Guayas, Los Ríos y Manabí. Como resultado, detuvieron a 12 personas por el presunto delito de delincuencia organizada relacionada con el tráfico de drogas de Ecuador al país africano.
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Aunque en Ecuador las rutas de exportación de droga hacia África son poco comunes o inusuales, este continente ha sido un terreno bastante explorado por las mafias italianas, albanesas y rusas, debido a su relativa economía y la falta de control estatal. Sin embargo, desde 2015, ha ido emergiendo en el panorama del crimen organizado desde América Latina, fortaleciéndose aún más durante la pandemia. Aquí los detalles.
Dos rutas para el envío de droga desde Ecuador a África
De acuerdo a una investigación realizada por la Universidad Flacso en 2019 revela que desde hace una década, aproximadamente un tercio de la cocaína que llega a Europa lo hacía a través de África Occidental.
El estudio destaca que mientras América Latina es productor, consumidor y exportador de cocaína, África Occidental sirve como lugar de acopio y tránsito, además, también estaría experimentando un crecimiento en el consumo.
El punto de inflexión se produjo cuando la geopolítica del crimen organizado cambió drásticamente debido a la pandemia del covid-19.
De hecho, la línea de tiempo coincide con el inicio de la investigación del operativo de esta madrugada que según Fiscalía data de 2020. La presunta organización "se habría aprovechado de las restricciones impuestas por la pandemia de covid-19" para enviar droga desde Ecuador a Gambia, con un destino final presumiblemente en Europa.
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Katherine Herrera, analista en temas de Seguridad y Defensa, señala que este cambio se vio acentuado por la reducción del consumo de cocaína en América del Norte, impulsada por la irrupción del fentanilo en Estados Unidos.
En ese sentido, el estudio de la Universidad Flacso señala otro factor en la colaboración entre organizaciones africanas y latinoamericanas: el monopolio de los carteles mexicanos en el tráfico de drogas hacia el norte. Esta situación obligó a los grupos criminales colombianos, como El Clan del Golfo, a diversificar sus rutas y buscar nuevos puertos.
Como resultado, se han convertido en puntos de transbordo más eficientes para la distribución de drogas hacia Europa, Asia y Medio Oriente. Entre los países que componen esta "zona caliente" en el continente africano:
"Incluyen Benín, Burkina Faso, Cabo Verde, Costa de Marfil, Gambia, Ghana, Guinea, Guinea Bissau, Liberia, Mali, Mauritania, Níger, Nigeria, Senegal, Sierra Leona y Togo", estudio Flacso.
En 2022, según el Observatorio de Crimen Organizado, los principales destinos de la droga enviada desde el país fueron España, Estados Unidos, Países Bajos, Bélgica, entre otros.
Así, Ecuador ya no se limita exclusivamente a los puertos marítimos, también ha adoptado dos nuevas rutas hacia África, dice la experta: una que conecta la selva amazónica ecuatoriana con Colombia y Venezuela, y otra que atraviesa la región de La Triple Frontera, desde Ecuador a Paraguay, Argentina, y Brasil.
El envío de droga al continente africano también se fundamenta en el objetivo de las organizaciones criminales de reducir costos, lo que permite un margen de ganancias más alto, estimado entre el 60% y el 70%, dice Herrera.
La mano de obra para las organizaciones criminales es tan accesible que a veces se paga con droga, explica. Estas personas suelen ser remuneradas solo por el acopio, desempeñando un papel netamente logístico en la cadena de valor del tráfico de drogas. Sin embargo, el costo en el mercado africano es considerablemente menor; mientras que un kilo de droga podría costar alrededor de USD 50 000, en Europa este precio se quintuplica.