Los cuatro frentes de la investigación de los menores desaparecidos en Guayaquil

Ronny Medina trata de mantener la calma y la esperanza que su hijo Steven, de 11 años, regrese a casa. Él es el padre de uno de los cuatro menores edad que desaparecieron el 8 de diciembre del 2024 tras ser aprehendidos por miembros de la FAE en el sur de Guayaquil.

Por ahora, al igual que la familia Arroyo y Arboleda, se espera los resultados de las entrevistas antropológicas que se realizaron. El miércoles 25 de diciembre, los familiares acudieron hasta la morgue para las diligencias de identificación de cuatro cadáveres calcinados que fueron hallados el 24 en un recinto de Taura, en Guayas.

Fernando Bastias, abogado del Comité de Derechos Humanos que acompaña a las familias, indicó que si las entrevistas no son suficientes, se tomarán pruebas de ADN. Hasta que eso ocurra, ¿cómo avanza la investigación del caso?

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Las pruebas forenses de los cuatro cuerpos hallados

Tras el hallazgo de cuatro cuerpos en la zona de Taura, en medio de un manglar, el laboratorio de Criminalística y Ciencias Forenses de Guayaquil tiene tres pruebas científicas para identificar los restos. La primera corresponde a las huellas dactilares, pero en este caso, se descartó, debido a que los cadáveres estaban calcinados.

Por eso, las familias fueron citadas el 25 de diciembre a la morgue. Allí se los entrevistó sobre rasgos físicos característicos de los cuatro adolescentes para identificarlos. Fueron consultados sobre la estatura, alguna patología y otras características como cicatrices, marcas de nacimiento, etc. Dichos resultados estarían el 30 de diciembre.

Sin embargo, la defensa de las familias no descarta que se hagan pruebas de ADN, pues los cadáveres están calcinados e incompletos. Los exámenes consisten en tomar muestras biológicas de los huesos para extraer material genético y compararlos con los padres. Dicho proceso, en el mejor de casos, tardaría 15 días, si no un mes.

Los abogados indicaron que solicitarán al Ministerio del Interior la participación de laboratorios internacionales para agilizar el proceso. Hasta eso, los padres piden que se siga buscando a sus hijos, hasta que estén los resultados.

16 militares bajo custodia

El 23 de diciembre, a los 15 días de la desaparición de los menores de edad, el ministro de Defensa, Gian Carlo Loffredo confirmó la implicación de militares de la Base Aérea de Taura. Los 16 uniformados aprehendieron a los cuatro adolescentes en un supuesto robo.

A la par de sus declaraciones, trascendió el allanamiento en el regimiento militar. Allí se decomisaron 16 celulares, dos vehículos y documentos.

Un día después, el 24 de diciembre, el Ministerio de Defensa informó que se ordenó poner bajo custodia a los 16 uniformados. Esto para "eliminar en su totalidad cualquier riesgo de fuga".

A la par, la Fiscalía solicitó fecha y hora para la audiencia de formulación de cargos por presunta desaparición forzada contra los militares. La diligencia será en la Unidad Judicial Penal Valdivia, en el sur de Guayaquil, el 31 de diciembre a las 10h00.

¿El caso podría pasar a ejecución extrajudicial?

El 24 de diciembre, la jueza Tanya Loor aceptó el habeas corpus instructivo a favor de la familia de los cuatro menores de edad y declaró la desaparición forzada bajo responsabilidad del Estado. Por eso, la Fiscalía investiga ese delito que tiene una pena de 22 a 26 años de prisión.

Sin embargo, la defensa de los adolescentes no descarta que se pueda variar el tipo penal del caso. Es decir, pasar de desaparición forzada a ejecución extrajudicial. Así lo mencionó Abraham Aguirre, defensor del Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos.

"Podría variar el tipo penal si se determina que los cuatro cuerpos trasladados al anfiteatro (Laboratorio de Medicina Legal) son los niños desaparecidos", afirmó.

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Declaraciones gubernamentales sobre la desaparición de los cuatro menores de edad

Las primeras declaraciones gubernamentales sobre los cuatro menores desaparecidos en Guayaquil fueron el sábado 21 de diciembre en la noche. El Bloque de Seguridad responsabilizó a grupos criminales del hecho.

Al día siguiente, el domingo 22, el presidente Daniel Noboa escribió en redes sociales acerca del caso. Aseguró que no se encubrirá a nadie y que la gente necesita respuestas.

Posteriormente, el lunes 23, el ministro Gian Carlo Loffredo confirmó que los militares aprehendieron a los menores en un supuesto robo. También infirió que los uniformados los dejaron libres al no haber ocurrido un delito grave. Calificó de inaceptable que no los hayan entregado a la Policía Nacional.

Ese mismo día, el Ministro de Defensa fue convocado al pleno de la Asamblea Nacional con los comandantes de las Fuerzas Armadas y la FAE, pero ninguno acudió. El jueves 26 de diciembre, fueron citados nuevamente en la Comisión de la Niñez y Adolescencia y tampoco asistieron.

En la cita, Luis Arroyo, papá de los hermanos Ismael y Josué, rechazó los comentarios de que sus hijos y los otros dos menores serían miembros de alguna organización delictiva. "Mi hijo mayor es futbolista federado, entonces no entiendo por qué han hecho este daño a estas tres familias", recalcó.

Mientras, en una entrevista en radio Centro, se pronunció nuevamente Loffredo. Allí volvió a referir la versión de que los uniformados actuaron en un supuesto robo y por eso aprehendieron a los menores. También que nada de lo que hayan hecho los niños, justifica que el día de hoy estén desaparecidos".

El Bloque de Seguridad iba a realizar una rueda de prensa sobre este caso en la Gobernación del Guayas. La convocatoria era para las 10:30 del jueves 26 de diciembre, pero una hora antes, fue cancelada.

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