¿Cómo es la cárcel Federal de Oaxaca, México, el modelo que busca replicar Daniel Noboa en Santa Elena?
El Gobierno de Daniel Noboa ha iniciado la construcción de lo que ha denominado como la cárcel del Encuentro, la cual está programada para inaugurar en abril de 2025 en Santa Elena. Aunque se ha mantenido en reserva la información sobre las características y especificaciones técnicas de esta prisión, se sabe que el gobierno busca replicar modelos de México y Estados Unidos.
Aunque inicialmente Noboa había mencionado planes para construir megacárceles como el Centro de Confinamiento del Terrorismo, inaugurado por Nayib Bukele en El Salvador. El pasado 21 de junio, en un boletín de la Secretaría de Comunicación, menciona que la infraestructura se edificará bajo los estándares internacionales utilizados en otras cárceles similares como el Centro Federal de Readaptación Social 13 de Oaxaca, México o ADX Florence, la cárcel de máxima seguridad en Estados Unidos, donde está recluido el narcotraficante Chapo Guzmán.
La elección de la cárcel de Oaxaca como referente llama la atención a expertos mexicanos consultados por Ecuavisa.com, pues el centro no es considerado el más relevante del país azteca aunque sí resaltan su equipamiento con tecnología de vanguardia. Aquí los detalles.
La tecnología como el corazón del centro carcelario
La cárcel ubicada en el municipio de Miahuatlán de Porfirio Díaz, en el estado de Oaxaca, está administrada por el gobierno federal y se encarga de personas que cometen delitos graves como la delincuencia organizada.
Esta cárcel fue establecida en 2013 como una instalación de máxima seguridad con capacidad para hasta 2 500 personas. Aunque es un centro moderno dentro del sistema penitenciario federal mexicano, no necesariamente es el más destacado en términos de tamaño o influencia nacional, expresa Karen Demerutis, directora del programa de Relaciones Internacionales del Instituto Tecnológico de Monterrey y experta en seguridad.
Demerutis sí destaca que este centro está equipado con tecnología de vanguardia para la identificación, control de accesos y sistemas de vigilancia, características que no todos los centros penitenciarios poseen en México, resalta. "La decisión de Ecuador seguro se basa en las instalaciones que tiene el centro, todo el diseño se hizo en función de buenas prácticas internaciones por lo que tiene elementos tecnológicos importantes", agrega.
Aquellos aspectos han permitido que entre sus fortalezas exista un control completo de los internos, además, de no tener hacinamiento: "No tiene una suerte de autogobierno, ni se han detectado indicios de que los reos tengan una colusión con las autoridades".
En ese eje, la cárcel del Encuentro con una inversión de USD 52 millones, también apunta a la tecnología para mantener el control en el centro que contará con módulos de máxima seguridad para el alojamiento de cerca de 800 personas privadas de la libertad (PPL) de alto perfil de peligrosidad o que presentan un alto riesgo de fuga.
El gobierno ha detallado que la cárcel contará con una infraestructura exterior e interior que incluirá seis torres de vigilancia de 9,5 metros de altura cada una, una muralla de nueve metros compuesta por seis metros de concreto y tres metros de malla inescalable. Además, dispondrá de módulos de máxima seguridad, áreas de estacionamiento, cocina, lavandería, armería, entre otros servicios.
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Sin embargo, el elemento central del centro penitenciario será su tecnología, que según ellos incluirá:
Más a fondo, el Gobierno se explaya que en el uso de tecnología que incluirá un data center, bloqueadores de señal celular, control de acceso basado en huellas digitales, sensores para detección perimetral temprana de intrusiones, y equipos de aduanas como detectores de metales, y máquinas de rayos X para una inspección minuciosa.
Noboa también toma como referente los módulos de prisión de la conocida ADX Florence o Florence Supermax, de Estados Unidos.
Sin embargo, la experta mexicana advierte que el uso de tecnología avanzada no garantiza por sí solo la efectividad del modelo penitenciario. Además, señala que en su país no se centra en la reintegración social debido al perfil de los detenidos en estos centros.
Según el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria de 2022 elaborado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos de México ha señalado aspectos negativos de la cárcel de Oaxaca, indicando que no figura entre las mejor calificadas, pues se han reportado denuncias por maltrato psicológico, acceso limitado a la salud de los reclusos y casos de tortura.
"El hecho de que cuente con tecnología avanzada no garantiza necesariamente que cumpla con los estándares internacionales de derechos humanos", menciona Demerutis.