Flappy Bird renace con una versión renovada diez años después de su retiro
Ya pasaron más de diez años desde que Flappy Bird, el sencillo, pero adictivo juego, fuera retirado de las tiendas de aplicaciones por su creador, Dong Nguyen. A pesar de su mecánica básica, controlar el vuelo de un pájaro a través de tuberías, el juego generó miles de dólares diarios en su apogeo.
Hoy, un equipo de fanáticos, bajo el nombre The Flappy Bird Foundation, adquirió los derechos del juego y se dispone a revivirlo con características renovadas y una experiencia multijugador.
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La nueva versión de Flappy Bird, que verá la luz en octubre de 2024, promete mantener la esencia original que conquistó a millones de jugadores, pero con adiciones que modernizan el clásico.
Entre las novedades, se incluyen nuevos personajes y modos de juego, así como un apartado multijugador masivo que permitirá a los usuarios competir entre sí, una opción ausente en el título original.
Aunque Nguyen no está involucrado en este relanzamiento, el equipo detrás del proyecto asegura que la jugabilidad mantendrá su característico nivel de dificultad y simplicidad.
El relanzamiento estará inicialmente disponible para navegadores web y plataformas de escritorio, mientras que los usuarios de dispositivos móviles, tanto iOS como Android, tendrán que esperar hasta 2025 para poder disfrutar de esta nueva versión en sus smartphones.
Aunque aún no se han revelado todos los detalles del modelo de negocio, se confirmó que el juego incluirá contenido desbloqueable y probablemente microtransacciones, lo que abrirá la puerta a futuras expansiones y actualizaciones.
El impacto de Flappy Bird en su momento y su legado
Flappy Bird debutó en 2013, sorprendiendo al mundo con su jugabilidad extremadamente desafiante y su diseño inspirado en los clásicos juegos de plataformas.
A pesar de su simplicidad, su dificultad y el carácter competitivo que generó entre los jugadores, lo convirtieron en un fenómeno global en pocos meses. Para cuando Nguyen decidió retirarlo en 2014, el juego ya había superado los 50 millones de descargas y generaba aproximadamente USD 50 mil diarios en ingresos por publicidad.
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La repentina eliminación del juego aumentó aún más su estatus de culto, con dispositivos que tenían el juego instalado vendiéndose por miles de dólares en sitios de subastas.
Flappy Bird marcó una tendencia en los juegos móviles, creando un legado que inspiró una nueva ola de títulos “casuales” con mecánicas simples pero desafiantes. Aunque el juego original ya no está disponible en las tiendas, su influencia sigue presente en muchas imitaciones y referencias dentro de la industria de los videojuegos móviles.