América celebra su aniversario y recuerda al "Chucho"
El América de México celebra su 98 aniversario pero no olvida la figua de Christian "El Chucho" Benítez, y le dedica una emotiva carta en su portal. A continuación la carta a Benítez:
Carta a Christian Benítez http://t.co/OZPSSpfTtx#UnCampeónNuncaSeVa pic.twitter.com/1PGLl7Yqav
— Club América (@ClubAmerica) October 9, 2014
¡Recuerdo Águila!
Una persona dentro de la cancha y una totalmente
distinta fuera de ella. Hace poco más de un año llorábamos al enterarnos de tu partida a Qatar, era inconcebible que un espléndido jugador, pero
sobre todo un gran amigo nos dejara para jugar en otro país, sin embargo te apoyamos como siempre nos apoyaste a
nosotros, porque sabíamos que tu vida se basaba en retos, ganas de trascender y siempre apuntaste a los más
altos estándares en todos los aspectos.
Te fuiste pero estábamos felices porque cada gol en tu nuevo equipo nos recordaría a tus anotaciones con las que
hiciste de América un equipo campeón, volveríamos a ver tus singulares bailes llenos de alegría, los cuales una vez
me contaste que eran dedicados a tu familia, volveríamos a ver tu rostro con una sonrisa única mostrando la alegría
que era para ti jugar futbol como si se tratara de un día de convivencia con tus hijos, algo sencillo, natural y lo
que más te gustaba hacer en la vida.
El Lunes 29 de julio de 20013 me levanté decidido a iniciar con el pie derecho la semana, pero esto será imposible
debido a tu partida, ya que esta vez es para siempre...
Pocos lo sabían, pero cuando te ponías lo zapatos te transformabas en un hombre feroz, valiente, que dejaba su alma
en el césped, pero al finalizar los entrenamientos o partidos esa actitud se quedaba en tus botines y te convertías
en una persona sencilla, humilde, alegre e incluso tímida, que salía corriendo de los pasillos de Coapa no tras un
balón sino para reunirte de prisa con tu familia, con quienes siempre estuvieron detrás de ti, apoyándote,
brindándote palabras de aliento y siendo tu motivación para ser el “Chucho”, delantero con el que miles de
americanistas, y muchos amantes de este deporte se identificaron y que vibraron con cada anotación que surgía de tus
gloriosos pies.
Así como después de cada gol tus manos apuntaban al cielo en muestra de agradecimiento hoy las mías hacen lo mismo,
junto mis palmas, levanto los brazos y señalo a lo más alto, justo ahí en donde ahora estás, y desde donde nunca
dejarás de cuidar a tu familia y a tu seres queridos, lugar donde tus goles tendrán un significado diferente, el de
que una persona única como tú, querida por tanta gente como tu familia, tus compañeros de trabajo, los medios de
comunicación y toda la afición jamás se irá, siempre estarás presente en nuestros corazones y en cada grito de gol
serás recordado como un grande, una persona que logró trascender a través de su pasión.
Te adelantaste en el camino pero algún día nos encontraremos, volveremos a disfrutar de tus goles, bailes y jugadas
de fantasía. Por lo pronto hoy te eres una estrella y te fuiste a donde tus características como persona merecen
estar, en la cúspide del cielo de donde sin lugar a dudas podrás transmitir tus valores a todos, así como una vez lo
hiciste con tus compañeros de equipo. Antes escuchar tu nombre era sinónimo de gol, de explosión de júbilo al
conseguir la máxima recompensa en el futbol, ahora, pronunciar “Christian Benítez” me hace recordar a un fiel
amigo, una entrañable persona, un soñador y luchador, que nunca se dejó vencer y que me enseñó que en la vida lo
único importante es el bienestar de tu familia, hacer lo que te gusta y transformar las debilidades en fortalezas.
Gracias Christian por tu amistad, tu compromiso, entrega, pasión, tu forma de enfrentar los retos y ver la vida con
optimismo y felicidad, por ser un gran padre, esposo y poner siempre a tu familia antes que nada ni nadie. Por dar
lo mejor de ti para asegurar el bienestar de los demás, de tu equipo y de tu afición que todavía está dolida y
consternada, esa que se siente herida pero a la vez contenta por saber que estás bien y tranquilo.
No quiero pensar que se fue “Chucho” un gran jugador, autor de más de 50 goles como americanista y artífice del más
reciente campeonato. Hoy se fue alguien más que eso, mis lágrimas son porque se va Christian, mi amigo y compañero
de batallas, un ser humano que dejó en mí una huella imborrable. Tus enseñanzas me acompañarán todos los días y tu
ejemplo será un camino a seguir.
Jamás te olvidaremos Christian.