Arsenal dice adiós a la liga y ve peligrar la ‘Champions’
Se complica el equipo de los 'Gunners' tras los últimos resultados de la Liga que antes dominaban.
A una distancia de diez puntos con el líder Liverpool, el Arsenal ha dicho prácticamente adiós a la liga inglesa y, desde una dudosa cuarta plaza, ve peligrar su participación en la ‘Champions’ del próximo año.
A pesar de mantenerse favoritos para ganar la Premier durante siete meses, el conjunto del francés Arsène Wenger, que lleva ocho años sin ganar un trofeo, solo ha sumado 64 puntos en 33 partidos con sonoras derrotas y un banquillo repleto de lesionados a seis jornadas de terminar la liga.
El último marcador negativo lo firmó ante el Everton con un 3-0 en el Goodison Park que le deja solo un punto por encima del conjunto de Merseyside, que tiene un partido menos en la lucha por la cuarta plaza con acceso a la Liga de Campeones.
En el "sprint final" de la Premier, el Arsenal afronta una lucha personal contra el conjunto del español Roberto Martínez, que, de consolidarse en el cuarto puesto, dejaría a los "gunners" sin jugar en Europa, donde este año cayeron de nuevo ante el Bayern Múnich en octavos de final.
Tras la derrota ante el Everton, el entrenador del Arsenal, el francés Arsène Wenger, reconoció la dificultad de conservar el cuarto puesto en la tabla aunque lo calificó de "factible".
"Tenemos que centrarnos en la calidad de nuestras actuaciones antes de soñar con los puestos", apuntó Wenger, que está "cien por ciento decidido a luchar por estar entre los cuatro primeros" de la Premier, después de acabar tercero la pasada campaña.
El Arsenal, que ha participado en "Champions" de forma consecutiva desde 1999, no ha conquistado el preciado trofeo en 18 campañas pese a estar presente en cuatro finales, la última en mayo de 2006, cuando perdió contra el Barcelona por 2-1.
En la Premier, los "gunners" han encajado cuatro sonoras derrotas en las diez últimas jornadas, tres de ellas con los vergonzosos resultados de 5-1 contra el Liverpool, 6-0 contra el Chelsea y la última contra el Everton de Martínez.
El conjunto de Londres, considerado entre los grandes del fútbol inglés, se ha desinflado esta temporada en la que cumple una década desde que consiguió su último título de liga en la campaña 2003-2004.
El declive del Arsenal, que perdió el liderato de la liga inglesa a finales de enero, comenzó con las bajas de algunos de sus futbolistas más desequilibrantes.
Primero fue uno de los protagonistas de la primera vuelta de la liga, el centrocampista galés Aaron Ramsey, en diciembre, seguido del defensa francés Laurent Koscielny, también a finales de año.
Le siguieron las bajas del extremo Theo Walcott en enero y de los centrocampistas Jack Wilshere y Mesut Özil en marzo, que dejaron rota la estrategia atacante del conjunto inglés.
De cara a los encuentros del próximo mes, el equipo recuperará a piezas clave como Ramsey, que sufrió una lesión en el cuádriceps, Wilshere, tras una fisura en el pie izquierdo, y Özil, que se lesionó el tendón de la corva.
El técnico "gunner" manifestó ayer no obstante que el equipo necesita una "actitud diferente" porque, al margen de jugadores y puntos, ha perdido el "carisma".
"No cuestionaría el espíritu del equipo, están centrados y quieren hacerlo bien, han perdido solo algo de confianza en el enfrentamiento", añadió el técnico, que "celebró" a finales de marzo mil partidos en el banquillo del Arsenal con la derrota frente al Chelsea.
El conjunto de Wenger afronta la recta final de la liga con cinco partidos por delante hasta el 11 de mayo contra el West Ham, Newcastle y West Brom en casa y, a domicilio, contra el Hull y el Norwich, equipos que se encuentran por debajo de la mitad de la tabla en la clasificación actual.
Antes competirá este fin de semana por la Copa de Inglaterra (FA Cup) en semifinales, el único título que puede atesorar esta temporada, y se enfrentará al Wigan Athletic el sábado.