Indígenas y sindicatos de Ecuador marcharán en contra de políticas laborales

Sindicatos e indígenas de Ecuador convocaron para este 19 de noviembre a una nueva protesta, la segunda en dos meses, en rechazo a proyectos como el de la reelección indefinida que tramita la Asamblea, de mayoría oficialista.

Será una "marcha pacífica" para pedir "el retiro de las enmiendas" constitucionales, incluida la de la reelección sin límites, dijo este lunes a la AFP, Édgar Sarango, presidente del Frente Unitario de Trabajadores (FUT), tras una conferencia de prensa.

El 17 de septiembre, organizaciones opuestas al gobierno movilizaron a miles de personas en Quito para rechazar las políticas de Correa, en una jornada que dejó 34 policías heridos y 53 detenidos. 

Esta vez las centrales obreras y grupos indígenas prevén marchar en las principales ciudades para protestar contra las propuesta de reelección, y un paquete de reformas laborales que planteó Correa el sábado último durante un acto multitudinario en Guayaquil (suroeste).

La iniciativa, que también fue presentada al Legislativo, está encaminada a recortar las diferencias de ingreso entre empresarios y obreros, fijar topes a las utilidades que reciben los empleados, eliminar los contratos a término fijo e incluir a amas de casa en el sistema obligatorio de protección social.

Sin embargo, los dirigentes sindicales creen que el gobierno pretende en el fondo vulnerar el derecho a la organización al plantear la "democratización de las organizaciones de trabajadores a través del voto universal, libre y secreto", según reza el proyecto.

Sarango insistió ante la prensa en la defensa de "los derechos colectivos, los derechos a la libertad de organización, el derecho a la libertad de sindicalización". 

Por su parte, Jorge Herrera, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaie), convocó a los nativos a protestar contra la reciente decisión de la Corte Constitucional de Ecuador de dar luz verde al Congreso para aprobar la reelección indefinida de autoridades elegidas por voto popular.

La oposición de derecha, que acusa a Correa de buscar perpetuarse en el poder a través de esa enmienda, intenta que el tema sea sometido a una consulta popular, mientras los indígenas quieren que se convoque a una Asamblea Constituyente.

Una vez que el Congreso apruebe la enmienda, Correa quedará habilitado para presentarse a un nuevo mandato en caso de que decida ser candidato en los comicios de 2017. El mandatario izquierdista llegó al poder en 2007.