Capaya, el más reciente huésped de la Cárcel 4, donde solo hay 50 detenidos
El exministro de Hidrocarburos durante el gobierno de Rafael Correa, Carlos Pareja Yannuzzelli, fue trasladado a la Cárcel 4, en el norte de Quito, por motivos de salud. La noche de este miércoles 22 de diciembre volvió a ese recinto penitenciario donde ya estuvo detenido mientras era juzgado por varios casos de corrupción.
El exfuncionario estaba preso en la cárcel de Ambato, donde debía cumplir con sentencias por peculado, enriquecimiento ilícito, delincuencia organizada y cohecho. Sin embargo, aún espera una posible condena más en el caso Singue.
Según el abogado de Pareja, Sebastián Espinoza, con el traslado se busca "garantizar sus derehos a la salud, integridad física y no va a estar en condiciones de hacinamiento".
El exministro es el más reciente huésped de la Cárcel 4, que aloja a otros personajes que han ostentado poder y que ahora están juzgados. El exdefensor del Pueblo, Freddy Carrión, quien fue sentenciado a tres años de cárcel por el delito de abuso sexual; y el excontralor Pablo Celi, quien cumple prisión preventiva por el presunto delito de delincuencia organizada, están en ese reclusorio.
La exfiscal Mariana Yépez indicó a Ecuavisa que el concepto de este tipo de lugares de reclusión es dar ciertos privilegios a personas que han ostentado niveles de representatividad, pero que a la vez no encarnan peligro.
Por eso existió el pabellón del expenal García Moreno donde estuvieron detenidos expresidentes como Eloy Alfaro y Carlos Julio Arosemena Monroy.
Ahora esa función la cumple la Cárcel 4. Por ahí han pasado los expresidentes Lucio Gutiérrez y Fabián Alarcón; el exvicepresidente Jorge Glas (ahora recluido en la cárcel de Cotopaxi); el exlegislador Daniel Mendoza; el exsecretario jurídico del Gobierno de Correa, Alexis Mera y el expresidente del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, José Carlos Tuárez.
Pero también en esa cárcel estuvieron personajes como Daniel Salcedo Bonilla y Jacobo Bucaram Pulley, ambos detenidos por casos de corrupción durante la pandemia.
Alrededor de 50 personas permanecen presas en la Cárcel 4, que es de baja seguridad, pero a pesar de ello solo se ha registrado una fuga durante su funcionamiento.