35 millones de personas en el mundo conviven con el VIH, según la OMS
Ante esta realidad, el organismo recomienda el uso de antirretrovirales a escala mundial.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó hoy nuevas directrices que recomiendan tratar con antirretrovirales a aquellas personas que hayan estado accidentalmente expuestas al virus VIH.
En el Día Mundial de Lucha contra el Sida, la OMS recordó que hay grupos de personas que están en riesgo de contraer el sida pero pueden ser conscientes del contagio y, por lo tanto, capaces de intentar evitar contraer el virus "a posteriori", lo que se conoce como "profilaxis tras exposición".
En este grupo de personas se incluirían los trabajadores sanitarios o las víctimas de una violación.
Estas recomendaciones se suman a las anunciadas el pasado julio, cuando la OMS presentó unas directrices para prevenir, diagnosticar y tratar a poblaciones clave como los homosexuales, los trabajadores sexuales, los drogadictos o los reos.
En julio, por primera vez, la OMS recomendó que los hombres que mantienen relaciones sexuales con otros hombres, además de usar preservativos, tomen antirretrovirales como método de prevención de contagio del sida.
Se ha demostrado que tomando antirretrovirales de forma constante, el riesgo de contagio desciende un 92 por ciento.
La OMS recordó hoy que a pesar de que, en 2013, 13 millones de personas accedieron a los antirretrovirales, muchas personas aún no cuentan con servicios de prevención y tratamiento.
Actualmente existen 35 millones de personas en el mundo que conviven con el VIH, de los cuales 3 millones son niños.
Se calcula que en 2013, unas 2,1 millones de personas contrajeron la infección y 1,5 millones de personas fallecieron a causa de enfermedades relacionadas con el sida.
El Día Internacional de la Acción contra el Sida se conmemora el 1 de diciembre de cada año, y se dedica a informar los avances contra la pandemia de VIH/sida causada por la extensión de la infección del VIH. Se conmemoró por primera vez el 1 de diciembre de 1988.
Se eligió esta fecha por cuestiones de impacto mediático, y desde entonces, el sida ha matado a más de 25 millones de personas en todo el planeta, lo que la hace una de las epidemias más destructivas registradas en la historia.